Las autoridades de Egipto ejecutaron este miércoles a Mohamed Adel, condenado por asesinar en junio de 2020 a Nayera Ashraf, una joven de 21 años y compañera universitaria, por rechazar su propuesta de matrimonio.
La ejecución de Adel se ha llevado a cabo en la penitenciaria de Jamasa, después de que un tribunal confirmara la sentencia de muerte en febrero, informa el diario egipcio 'Al Ahram'.
Ashraf fue apuñalada y degollada hasta morir en el campus de la Universidad de Mansura, unos hechos que fueron grabados por el propio asesino y publicados en sus redes sociales, lo que generó un gran impacto tanto dentro como fuera de Egipto, y reabriendo el debate en un país con altos índices de violencia contra las mujeres.
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La legislación egipcia
Las ejecuciones en Egipto, el tercer país en 2021 que más la aplicó, suelen llevarse a cabo cuatro años después de la condena, si bien este caso, la Fiscalía pidió que se acelerara el proceso debido a su repercusión.
Durante el juicio, la Fiscalía presentó 25 testigos, incluidos estudiantes y guardias de seguridad que vieron el crimen. Amigos de la víctima contaron que Adel había estado acosándola y amenazándola después de que rechazara su proposición de matrimonio, unos hechos que fueron corroborados con denuncias a la Policía.
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La decisión del tribunal, tomada unas dos semanas tras el asesinato, fue aprobada por el muftí de Egipto, Shaoqi Allam, máxima autoridad religiosa del país, a quien los tribunales suelen remitir las sentencias a muerte para dar una opinión no vinculante sobre el caso antes de que los veredictos sean ratificados.
La violencia machista en Egipto
El año pasado se reportó que al menos 31 % de las mujeres casadas, incluidas las divorciadas, fueron víctimas de violencia machista en 2021 en Egipto, un país azotado por una serie de feminicidios que conmocionaron a la sociedad.
Con información de EuropaPress.