A pesar de obtener su libertad en octubre del año pasado, Maurice Hastings ganó la batalla legal en su contra, luego de que el juez William C. Ryan, de un tribunal de Los Ángeles, lo declaró inocente tras pasar poco más de 38 años en la cárcel.
El hombre vio la luz del Sol de nuevo al comprobar que las pruebas de ADN señalaban a otro sospechoso, por lo que hace unos meses, el juzgado anuló su condena.
Pero eso no era suficiente, por lo que sus abogados regresaron a los tribunales para exigir que se le declarar inocente, de acuerdo con CBS News.
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Al finalizar la audiencia, Hastings se dijo muy feliz y agradecido con el juez, quien le ofreció disculpas por todo lo que tuvo que pasar.
Además, comentó que está listo para seguir con su vida. Por su parte, el fiscal de distrito, George Gascón, declaró que el hombre sobrevivió una pesadilla.
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En un comunicado, contó que “pasó casi cuatro décadas en prisión agotando todas las vías para demostrar su inocencia mientras se le negaba rápidamente”.
“Pero el Sr. Hastings se ha mantenido firme y fiel en que un día escucharía a un juez proclamar su inocencia”, señaló Gascón.
¿Qué pasó con Maurice Hastings?
El sujeto era acusado del asesinato de Roberta Wydermyer, quien también fue abusada sexualmente para después recibir un tiro en la cabeza.
Tras esto, las autoridades encontraron su cuerpo en la parte trasera de su coche en Inglewood.
Ante esto, Hastings se convirtió en uno de los principales sospechosos, por lo que la oficina del fiscal de distrito pidió la pena de muerte; sin embargo, esto no pasó.
Fue hasta que un segundo jurado lo sentenció en 1998 a cadena perpetua sin libertad condicional.
Maurice Hastings se mantuvo firme en todo momento sobre que era inocente, por lo que buscó pruebas de ADN que lo ayudaran a demostrarlo.