El Gobierno de Guatemala aseguró este lunes que continúa el estudio de iniciativas con Estados Unidos para “reducir el flujo de migración irregular” con un programa de visas temporales para empleos agrícolas estacionales.
El país norteamericano “priorizará” los procedimientos para los permisos de viaje del Programa de Visa de Trabajador H-2A sobre otras solicitudes de visa con el fin de “regular y transparentar la actividad de reclutadores laborales extranjeros en Guatemala”.
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En un comunicado conjunto de los Gobiernos guatemalteco y estadounidense, ambas Administraciones aseguraron que EE.UU. desarrollará campañas con el Ministerio de Trabajo guatemalteco con el fin de centrarse en “la contratación de personal calificado” para trabajar de manera estacional en la agricultura del país norteamericano.
Según el texto, difundido en Guatemala por el Ministerio de Gobernación (Interior), con el programa de visas temporales esperan “mejorar la capacidad de protección y ampliación al acceso a las vías regulares de migración en Guatemala” con el fin de “contribuir en la reducción de la migración irregular”.
Ambos países afirmaron que comparten “la causa común” para enfrentar la crisis humanitaria en curso y la seguridad fronteriza y la mitigación de “los factores de empuje migratorio”, así como “reforzar las capacidades y facilitar la cooperación regional”.
Según el documento, ambos países “protegerán mejor a las poblaciones más vulnerables de Guatemala mientras enfrentan la migración irregular” mediante ese programa de trabajo temporal, evitando así que los migrantes “sean víctimas de redes de traficantes”.
Estas “deliberaciones” que sostienen los Gobiernos son parte de “un proceso iniciado meses atrás” con la orientación de ampliar la capacidad de “recepción de migrantes”, de la adjudicación de “reclamos de protección, vivienda e infraestructura provisional necesaria”.
Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), un total de 54.626 guatemaltecos indocumentados han sido retornados desde México y Estados Unidos durante los primeros seis meses del 2019.
La OIM informó el pasado 18 de julio que bajó en un 23,1 por ciento la cantidad de menores no acompañados durante el primer semestre de 2018 respecto de los primeros seis meses de 2018, cuando habían vuelto a Guatemala 2.749, por los 2.115 de enero a junio de este año, que en un 82,1 por ciento proviene de México.
La región a la que más personas han vuelto es al departamento occidental Huehuetenango, fronterizo con México, con 8.163 personas, seguido del también vecino San Marcos, con 7.772, mientras que el departamento central de Guatemala, donde se encuentra la capital del país, es la quinta localidad con más retornados con 3.419 migrantes.
El Gobierno de Donad Trump endureció aun más su política migratoria al anunciar la semana pasada que negará el asilo a los migrantes que no lo soliciten antes en un “tercer país seguro”, una medida calificada de “arbitraria y caprichosa” por organizaciones defensoras de los inmigrantes que hay han presentado una demanda para bloquear la nueva normativa que impide se otorgue a inmigrantes asilo político.