Audio relacionado
En entrevista para MVS Noticias con Pamela Cerdeira, Vanessa Gámez, madre de Ana Amelí García Gámez, habló sobre la incertidumbre que persiste en el caso de la desaparición de su hija.
Han pasado 54 días desde que Ana Amelí García Gámez fue vista por última vez tras subir al Pico del Águila, en el Ajusco, y hasta ahora no existen avances claros en la investigación sobre su paradero. Su madre, Vanessa Gámez, señaló que el proceso con las autoridades ha sido lento y sin líneas sólidas de investigación, lo que alimenta la preocupación de que el caso quede en el olvido.
"Desafortunadamente, el tema con las autoridades va súper lento. Honestamente, ya me estoy molestando más porque pareciera que va a ser un caso más. Se ve que siguen trabajando, eso es lo que ellos nos dicen, sin embargo, no hay líneas claras de investigación, no hay pistas. Y bueno, en las últimas reuniones lo que nos dicen es que no tienen mucho conocimiento de que haya una operación grande de grupos delictivos en la zona", relató Vanessa Gámez.
Te podría interesar
La familia ha insistido en que la zona es conocida por la presencia de grupos delictivos, talamontes y fosas clandestinas, lo que hace difícil aceptar que las autoridades no tengan información al respecto. Aunque las instituciones aseguran que trabajan en distintas líneas, no han presentado resultados concretos ni claridad sobre las búsquedas realizadas.
"Todo el mundo sabemos que es un secreto a voces que hay grupos delictivos en la zona y que, pues sí, lamentablemente no todos, pero muchos de los habitantes tienen miedo, están asustados", señaló la madre de Ana Amelí.
Te podría interesar
¿Por qué no hay avances en la investigación?
Vanessa cuestionó que desde las primeras 72 horas se considerara la posibilidad de que su hija hubiera sido sustraída del lugar, pero hasta la fecha no hay pruebas ni seguimiento claro de esa línea. La familia sostiene que Ana Amelí pudo ser vigilada y convertida en blanco fácil al estar sola, además de que los guías no la acompañaron ni garantizaron su seguridad en la ruta de regreso.
Las autoridades han mencionado que parte de la investigación se centra en la telefonía, sin embargo, la zona donde desapareció carece de señal, lo que reduce las posibilidades de obtener información útil. Esta situación ha generado frustración, pues los familiares consideran que las primeras semanas fueron cruciales y que se pudo haber actuado con mayor rapidez.
"Están como muy esperanzados a la parte de la telefonía. Y esto, la verdad es también un tema, porque si mi hija no tenía tantos respaldos de información o no era una persona tan pública en redes sociales, pues te vas dando cuenta de que eso no te va a ayudar", aseguró Gámez.
¿Un caso más entre cientos de desapariciones?
El dolor de la madre se mezcla con la indignación al escuchar que algunos funcionarios se refieren al suyo como un “caso mediático”, lo que abre cuestionamientos sobre el trato diferenciado que reciben otros reportes de desaparición. En la Ciudad de México, se registran más de mil desapariciones, lo que refuerza el temor de que la búsqueda de Ana Amelí se diluya entre la burocracia y la falta de acción.
"Hemos sido de verdad empáticos, pacientes, hemos aportado toda la información que hemos podido, hemos buscado con ellos, pero no puede ser que no avancemos en las investigaciones. Yo no sé, pareciera que tienen miedo de indagar", indicó Vanessa Gámez.
La familia ha colaborado con la Sedena, Guardia Nacional y la Comisión de Búsqueda, pero señala que aún no cuentan con documentación completa de los operativos ni con acciones efectivas, como la difusión de retratos hablados. Vanessa insiste en que el tiempo avanza y con él se desvanece la esperanza de encontrar con vida a su hija.