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En entrevista para MVS Noticias con Manuel López San Martín, Gabriel Regino, abogado penalista y profesor en la Facultad de Derecho de la UNAM, nos compartió su análisis del asesinato de Ximena Guzmán y José Muñoz, colaboradores de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, señalando que se trata de un hecho complejo por el perfil de las víctimas y de quienes ordenaron el crimen.
“Es un hecho muy lamentable, un artero crimen contra dos personas que estaban en funciones políticas y de manera muy cercana a la jefa de gobierno de la Ciudad de México, y que no estaban vinculadas con investigaciones criminales ni nada por el estilo”, afirmó Regino.
El especialista explicó que, aunque se han realizado cateos y detenciones relacionadas con la logística del crimen, estas no acercan a conocer quién dio la orden ni los motivos del ataque. “Son detenidos circunstanciales que podrían responder por otros delitos, pero sustancialmente no hay nada que nos diga quiénes son los autores intelectuales”, agregó.
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Durante su análisis, Gabriel Regino advirtió sobre la complejidad del esquema criminal: “Las organizaciones grandes han copiado sistemas empresariales y gubernamentales, creando células que ni se conocen entre sí. Estas subcontrataciones criminales pueden desconocer incluso a quién le colaboró con los teléfonos celulares o las placas”.
El abogado destacó además la dimensión política del crimen. “Quien tomó la decisión de seleccionarlos lo hizo porque tenía información estratégica sobre su rol y sus conexiones privadas dentro del círculo político de la jefa de gobierno. La intención era liquidar a ambos, no a uno, lo que empodera la hipótesis de un móvil político”, señaló.
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"Si nos centramos en una creencia de que está el crimen organizado detrás de todo esto, estamos perdiendo la brújula de la investigación porque crimen organizado es una categoría abstracta y amplísima", agregó.
Respecto a la profesionalidad de los perpetradores, Regino detalló: “Hablamos de un grupo de profesionales muy bien organizado que sabía lo que hacía y lo que iba a provocar. El uso del arma de manera quirúrgica, rematando a las víctimas, demuestra capacitación y planificación”.
Finalmente, el abogado resaltó la importancia de continuar con la investigación: “Hay que agotar las líneas de investigación, revisar metadatos de teléfonos y conexiones de las víctimas. Es preocupante que hayan pasado tres meses y no tengamos resultados concretos”, sentenció.