Audio relacionado
En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, José Luis Vázquez, dueño de calzado Pepe Tamayo de León, Guanajuato, habló sobre que México le da “patada” al calzado chino con arancel de 25% a zapatos extranjeros.
El sector del calzado mexicano ve con esperanza el anuncio del arancel del 25% a los zapatos importados, especialmente provenientes de China. Así lo expresó José Luis Vázquez, propietario de la marca “Pepe Tamayo”.
La pelea del calzado mexicano vs el chino
“Si realmente lo van a ejecutar, esperamos que sea lo más pronto posible. Ya es mucho tiempo que estamos esperando eso”, declaró Vázquez, quien representa a una de las empresas tradicionales del sector.
Te podría interesar
El empresario detalló que muchos fabricantes nacionales han sufrido una fuerte caída en ventas debido a la entrada masiva de calzado extranjero a precios bajos, situación que se agrava con prácticas poco claras.
“Es un tema delicado porque no soy el único, mucha gente ha dejado de fabricar. Se aliaron con chinos, pusieron bodegas, comenzaron a importar. Es algo que yo pienso no es legal, hay chinos haciendo zapatos aquí”, denunció.
Te podría interesar
Chinos trabajando en México
Además, señaló la precariedad laboral en algunas de estas operaciones. “Nos han invitado, pero tienen gente trabajando sin pagar IMSS, sin pagar nada”, dijo. En contraste, Vázquez asegura que su empresa ha optado por resistir, apostando por calidad y por el uso de piel genuina.
“Teníamos productos hechos en México, pero competían con lo chino como con el plástico. Lo que optamos por hacer fue aguantar y enfocarnos en calzado de piel. Somos el número uno. Nos enfocamos en calidad y precio, esto no lo encuentras en China”, sostuvo con firmeza.
El desempleo en la industria del calzado mexicano
Actualmente, alrededor de 8 a 12 personas trabajan en su fábrica, pero admite que ha sido complicado mantener el empleo: “Nos ha llegado gente buscando trabajo, muchos se fueron a otras fábricas. Los hijos de zapateros incluso ya no quieren seguir. Se está viendo crítica la parte laboral. Yo pienso que sí ha caído el desempleo en el área de calzado”.
El empresario también pidió que el gobierno no se limite al arancel, sino que refuerce la supervisión aduanera y regule la entrada de insumos: “Que esto siga, no solo es con el arancel. También viene lo aduanal, porque están batallando con los materiales. Sale más barato comprar el sintético. También son los insumos”.
Con este nuevo arancel, el sector espera un respiro ante la competencia desleal, pero también demanda una estrategia integral para proteger a la industria del calzado mexicano, motor económico de regiones como León, que aún lucha por mantenerse firme frente al embate asiático.
