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Contrabando de gasolina: 'Esto no ocurriría sin complicidad en aduanas', advierte especialista

Hoy en día, se detectan trenes, buques y más de 120 carrotanques con combustible ingresado bajo secciones arancelarias falsas para evadir impuestos.

Contrabando de gasolina: negocio millonario y fuera de control en México.
Contrabando de gasolina: negocio millonario y fuera de control en México.Créditos: Cuartoscuro
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Entrevista Gonzalo Monroy / Luis Cárdenas

En entrevista para MVS Noticias con Luis CárdenasGonzalo Monroy, especialista en temas energéticos, habló sobre el aseguramiento de más de 15 millones de litros de combustible.

El contrabando de combustibles en México ha escalado a niveles industriales, con redes criminales que han sustituido el robo tradicional a ductos por esquemas de importación ilícita, donde el combustible es adquirido legalmente en Estados Unidos, internado al país con documentos falsos o manipulados, y vendido sin pagar impuestos, principalmente a flotillas privadas o empresas logísticas.

Desde el mes de marzo, se han detectado más de 70 millones de litros de combustible de origen ilegal. El especialista Gonzalo Monroy explica que este fenómeno es una consecuencia directa del abandono de la estrategia de seguridad energética implementada en 2019.

A pesar de los esfuerzos iniciales del gobierno para contener el robo de combustible, las medidas no fueron sostenidas, lo que dejó vulnerable la infraestructura y permitió el crecimiento del contrabando.

"En 2019, cuando empezamos a platicar de estos temas en los medios, derivado del desabasto que ocurrió en siete estados de la República, el presidente López Obrador había empezado haciendo algo bastante llamativo, bastante contundente, cuando se cerraron las refinerías de Salamanca y los ductos de varias partes del país. Pero obviamente esto puso ahí a los marinos, al ejército, a la Guardia Nacional, pero no sostuvo la estrategia", contó el especialista.

"Todo el mundo recordará que en la primera presidencia del presidente Trump, justamente le pidió a Andrés Manuel que si no ponía los elementos de seguridad a cuidar la frontera con Centroamérica, no se iba a quitar los aranceles, y el presidente López Obrador accedió. ¿Qué ocurrió? Pues prácticamente los ductos, la infraestructura volvió a quedar vulnerable y fue un problema que fue creciendo y creciendo", añadió.

Combustible robado: el nuevo negocio del crimen organizado

Hoy en día, se detectan trenes, buques y más de 120 carrotanques con combustible ingresado bajo secciones arancelarias falsas, como lubricantes o aditivos, para evadir impuestos. Esta operación genera ganancias que pueden superar los 300 millones de pesos, afectando directamente al erario público.

"Pasamos del picoteo de los ductos, en algunos casos de manera muy, pero muy artesanal, hasta ya un nivel de sofisticación donde traemos ya buques, donde traemos trenes, no solamente algunos carrotanques, sino ya más de 129 carrotanques", afirmó Monroy.

"Estamos hablando que esto no puede ocurrir, es demasiado grande, sin la complicidad y participación en las aduanas, de los agentes aduanales, de muchísimos más actores", aseguró.

El combustible robado no siempre llega a estaciones de servicio. Muchas veces es distribuido directamente a empresas, lo que complica su rastreo. En otros casos, termina adulterado y vendido a precios bajos, lo que daña gravemente los motores de los consumidores.

Uno de los casos más emblemáticos es el de una “mini refinería” clandestina en Coatzacoalcos, donde grupos criminales realizaban un proceso rudimentario de destilación de petróleo crudo para producir gasolina de baja calidad, mezclada con etanol para simular características comerciales.

"Los delincuentes roban de todo. Muchas veces no saben ni siquiera lo que hay en estos ductos. También, por ejemplo, existe el robo del gas LP. Por ejemplo, en el caso exactamente en Veracruz, es de todos conocido, al menos desde el 2011, que se roban cierta cantidad de petróleo, pero no tienen qué hacer con esto", indicó.

La falta de transparencia de las autoridades y la confusión entre decomisos reales y estimaciones generan incertidumbre sobre la magnitud del problema. El propio sistema de monitoreo de Pemex impide diferenciar entre fugas, robos o pérdidas operativas, dificultando estimaciones confiables.

El contrabando de combustibles no es un delito menor: es una industria criminal en pleno auge, que combina defraudación fiscal, corrupción y omisión institucional.