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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Arturo Espinosa Silis, director de Laboratorio Electoral, explicó por qué la organización buscará impugnar triunfos de candidaturas riesgosas de la Elección Judicial.
Espinosa explicó que estas impugnaciones no se dirigen a candidatos o personas específicas, sino al diseño y ejecución del proceso electoral, que calificó como "improvisado, inequitativo y carente de legitimidad".
"Lo que vamos a defender es la democracia, el derecho a tener elecciones libres y auténticas. No podemos normalizar este tipo de procesos", aseguró.
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¿En qué se centran las impugnaciones?
Las impugnaciones se centran en tres elecciones clave: la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Tribunal de Disciplina Judicial, y la Sala Superior del Tribunal Electoral. Espinosa señaló que en el caso de la Suprema Corte y el Tribunal de Disciplina, será la propia Corte quien conozca del caso, mientras que para la Sala Superior será el Tribunal Electoral quien resuelva.
Entre los argumentos presentados destacan más de 200 pruebas que evidencian una serie de irregularidades: inducción al voto mediante acordeones distribuidos desde el oficialismo, mal diseño de los distritos, boletas que sesgaron la votación y ausencia de reglas claras por parte de la autoridad electoral, que además careció de presupuesto suficiente. “La coincidencia entre los candidatos promovidos en los acordeones y quienes ganaron es de más del 80%”, denunció.
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De acuerdo con Espinosa, el proceso fue tan deficiente que ni los comités de evaluación realizaron su trabajo, y todo se dio en un contexto donde no hay partidos políticos que defiendan los derechos ciudadanos en este tipo de elecciones. Por ello, subrayó que es responsabilidad de la sociedad civil alzar la voz.
¿Qué organizaciones participaron?
Las organizaciones que presentaron las impugnaciones son Poder Ciudadano y el Consejo Nacional de Litigio Estratégico, siendo esta última reconocida oficialmente con legitimación para actuar. Ambas buscan que el sistema reconozca que se violaron principios como la equidad, legalidad, certeza y seguridad jurídica.
“Si las autoridades no quieren ver la realidad, están defendiendo intereses políticos y no la democracia”, afirmó el especialista, quien también destacó que organismos como la OEA y otros observadores internacionales ya han advertido sobre las fallas en este proceso.
Finalmente, Espinosa sentenció que callar frente a estas irregularidades es igual de perjudicial que avalarlas. “No queremos quedarnos callados. Queremos más democracia, pero eso requiere que alguien la defienda”, concluyó.