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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, Emilio Saldaña, analista de tecnologías para la información, explicó por qué la lección del nuevo papa provocó grandes picos en X y redes sociales.
El nuevo líder de la Iglesia Católica no solo ha provocado interés religioso, sino que ha generado una inesperada revolución en las plataformas digitales. Desde su elección, los picos de interacción en redes sociales como X, Instagram y YouTube se dispararon, alcanzando cifras que usualmente solo logran los grandes eventos globales. ¿La razón? Su perfil tecnológicamente avanzado y su visión sobre el futuro de la humanidad en la era de la inteligencia artificial.
¿Por qué la lección del nuevo papa provocó grandes picos en internet?
Saldaña, explicó que esta reacción masiva en internet se debe a que “estamos entrando en una verdadera revolución que va a tener consecuencias culturales, sociales, religiosas y laborales. Todos los sistemas humanos se van a transformar”.
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Y el hecho de que el nuevo Papa no solo entienda esa complejidad, sino que además haya trabajado desde antes en temas relacionados con tecnología, es clave para entender por qué ha conectado tan rápido con las audiencias digitales.
“Él estudió matemáticas y ha impulsado clínicas rurales conectadas por satélite en zonas alejadas, como en Lambayeque, donde logró brindar atención médica mediante telemedicina. Eso es un uso muy concreto de la tecnología para mejorar la vida de las personas”, subrayó Saldaña.
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Pero el nuevo Papa no se limita a conectar con los creyentes. Ha alzado la voz en temas como la inteligencia artificial y el uso ético de los datos. “Fue clave en la firma de la ‘Llamada de Roma para la Ética de la Inteligencia Artificial’, que logró reunir a gigantes tecnológicos como Cisco, IBM y Microsoft en un mismo acuerdo”, explicó Saldaña.
Dentro de sus prioridades se encuentra lo que él ha denominado “humanismo algorítmico”: una postura que busca que la inteligencia artificial esté siempre al servicio de la dignidad humana y que combata fenómenos como los deepfakes, los cuales, en sus palabras, “erosionan la verdad”.
“El Vaticano se convierte en un juez de opinión muy relevante en la regulación de inteligencia artificial a nivel global. Y qué mejor que alguien que no solo entiende el lenguaje de los algoritmos, sino que los ha puesto al servicio del bien común”, concluyó Saldaña.
La llegada del nuevo Papa marca un antecedente no solo para la Iglesia, sino para el diálogo global sobre tecnología, ética y humanidad. La revolución no es solo espiritual; es también digital.