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En su colaboración para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Pedro Tello, especialista en temas financieros, habló sobre si es verdad que los hogares mexicanos tienen ahorros suficientes para afrontar una recesión, como asegura la SHCP.
En días recientes, la Secretaría de Hacienda aseguró que México tiene una economía sólida, descartando una posible recesión y destacando que las familias mexicanas cuentan con suficientes ahorros para enfrentar una crisis. Sin embargo, las cifras de la Encuesta Nacional de Salud Financiera 2024 parecen contradecir ese optimismo.
Pedro Tello Villagrán, analista económico, expuso que aunque el 52% de los mexicanos mayores de 18 años declara tener algún tipo de ahorro, la mayoría cuenta con montos mínimos: 30% de ellos apenas tiene una quincena ahorrada, mientras que solo el 10% tiene fondos suficientes para sobrevivir tres meses sin ingresos.
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"Los datos de la Encuesta Nacional de Salud Financiera apuntan en un sentido muy diferente de lo que asegura Hacienda al decir que los mexicanos podrían afrontar una recesión con los ahorros que tienen actualmente", contó Tello.
"Solo 52 de cada 100 mexicanos tienen un ahorro; de ellos, 30 aseguran que su ahorro equivale única y exclusivamente a una quincena de su ingreso mensual... Solamente el 10% tiene un ahorro equivalente a tres meses de su ingreso", agregó.
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Esta disparidad entre el discurso oficial y la realidad financiera de las familias mexicanas plantea serias dudas sobre la capacidad real de la población para enfrentar una recesión económica.
Además, Tello alertó sobre un nuevo repunte inflacionario en la primera quincena de mayo de 2025, afectando directamente los precios de productos básicos como pollo, carne, verduras, renta, salud y medicamentos.
Este fenómeno, que lleva ya tres años presente, amenaza con prolongarse hasta 2026 si el Banco de México relaja su política monetaria, como se ha anunciado recientemente.
En este contexto, el crecimiento económico se mantiene prácticamente estancado, con una generación limitada de empleos formales. El contraste entre los datos oficiales y la percepción en los hogares mexicanos refleja una realidad económica mucho más frágil de lo que Hacienda reconoce.