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En entrevista para MVS Noticias con Adrián Jiménez en ausencia de Manuel López San Martín, el Dr. Tonatiuh Guillén, excomisionado del Instituto Nacional de Migración e investigador de la UNAM, trazó un panorama poco alentador para los derechos humanos en la frontera entre México y Estados Unidos. En sus palabras, estamos ante “el momento más crudo, más duro” para los migrantes en la región.
La situación, según Guillén, se ha endurecido a tal punto que tanto México como EE.UU. han convertido la frontera en un muro humano de contención. Por un lado, el gobierno estadounidense ha militarizado su lado fronterizo y reducido al mínimo —o de plano cancelado— las oportunidades de solicitar asilo. Del otro, México ha hecho lo propio, desplegando a más de 10 mil efectivos de la Guardia Nacional y Ejército cerca de la frontera.
“El peor escenario para los migrantes”
Aunque la presidenta Claudia Sheinbaum niega que su administración esté haciendo el “trabajo sucio” a Estados Unidos, el Dr. Guillén no lo ve tan claro. “El gobierno se ha alineado con las expectativas del gobierno de Trump”, afirmó, señalando que no ha habido disposición de incomodar las negociaciones con el vecino del norte, particularmente en temas económicos.
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Guillén incluso alude al respaldo de personajes como Tom Homan, exdirector de ICE y símbolo de la línea dura contra la migración, quien ha felicitado a México por su papel. “Eso no nos retrata bien como gobiernos y como sociedades solidarias”, apuntó el investigador.
Una política que olvida a las personas
Más allá de la estrategia, Guillén subrayó que el gran ausente en toda esta maquinaria es el ser humano. “Se trata de personas con derechos”, dijo, muchas de ellas con perfil de refugio, atrapadas en un sistema que las persigue, las detiene y las deporta. “Estamos anulando derechos”, sentenció.
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El académico hizo un llamado a replantear la política migratoria mexicana desde una lógica humanitaria y de desarrollo: “Hay gente muy calificada huyendo de sus países. Podríamos aprovechar ese capital humano con políticas de inclusión”.
Sobre las llamadas ciudades santuario en EU, Guillén denunció una campaña de terror promovida por el gobierno de Trump, que busca que incluso los migrantes se autodeporten por miedo a ser capturados. “Es una política de miedo, incluso propagada por medios publicitarios”.