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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Juan Carlos Anaya Castellanos, director de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, habló de los productores de limón en Michoacán: Entre las presiones del crimen organizado y el posible regreso de los aranceles de Trump.
Los productores de limón en Michoacán enfrentan una crisis sin precedentes, atrapados entre la extorsión del crimen organizado y la incertidumbre por el posible regreso de los aranceles impuestos por Estados Unidos durante la administración de Donald Trump. Juan Carlos Anaya Castellanos, director de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, explicó en una entrevista reciente los desafíos que amenazan la viabilidad de este sector clave para la economía regional.
Extorsión: Un "impuesto narco" que ahoga al campo
Anaya destacó que los productores de limón llevan más de una década pagando extorsiones al crimen organizado. "Hace dos años, los productores pagaban 50 centavos por kilo de limón, pero este año la cifra llegó a $2 por kilo, lo que representa cantidades millonarias", señaló.
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Aunque la Guardia Nacional ha intervenido, la extorsión persiste. "Es un impuesto narco que impacta a productores, empacadores y, finalmente, al consumidor", afirmó.
El experto comparó esta situación con lo que ocurre en Tamaulipas, donde los productores de sorgo y maíz también viven bajo la sombra del crimen organizado. "En Michoacán, Guerrero y Chiapas, los productores no tienen a dónde ir. El líder limonero fue asesinado hace meses, y eso ha generado un clima de miedo", explicó Anaya.
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El abandono del campo y la toma del crimen
La violencia y la extorsión han llevado al abandono de tierras y a la toma de control de zonas completas por parte del crimen organizado. "Muchos productores han dejado sus campos porque no quieren lidiar con el crimen. Otros han sido absorbidos por estas redes ilícitas, ya que no tienen otra opción para sobrevivir", lamentó Anaya.
Este fenómeno no solo afecta a los limoneros, sino también a productores de aguacate y otros cultivos. "Es una verdadera pena ver cómo el campo mexicano sufre por la inseguridad. Los reportes oficiales dicen que las cosas están mejorando, pero la realidad en el campo es muy diferente", agregó.
La amenaza de los aranceles de Trump
Además de la violencia, los productores enfrentan la incertidumbre por el posible regreso de los aranceles impuestos por Estados Unidos durante la administración de Trump. "Si se reinstauran los aranceles, sería otro golpe devastador para el sector. Los limoneros ya están al límite", advirtió Anaya.
Estos aranceles, que en su momento llegaron al 25%, afectaron gravemente las exportaciones agrícolas mexicanas. Su posible regreso representa una amenaza adicional para un sector que ya lucha por sobrevivir.
Por ello, hizo un llamado a las autoridades para fortalecer la seguridad en las zonas rurales y apoyar a los productores. "Necesitamos políticas públicas que protejan al campo y garanticen la viabilidad de los productores. Sin seguridad, no hay futuro para el sector agrícola", concluyó.
Mientras tanto, los limoneros de Michoacán siguen resistiendo, atrapados entre la violencia y la incertidumbre económica, en una lucha por preservar su forma de vida y su contribución a la economía nacional.