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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, Ángel Domínguez Catzin, presidente del Colegio de Pilotos Aviadores de México, explicó las razones por las que el gremio rechaza la contratación de tripulaciones extranjeras en aerolíneas que operan en el país.
Su postura se centra en la defensa de la seguridad aérea y el respeto al marco regulatorio mexicano, especialmente tras la reciente autorización de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) para permitir el uso de pilotos extranjeros en ciertos vuelos.
“La máxima autoridad dentro de un avión debe ser el comandante mexicano”, afirmó Domínguez Catzin, al destacar que las leyes mexicanas otorgan responsabilidades exclusivas a los pilotos nacionales.
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Recordó que esta estructura regulatoria se ha construido durante años y “no debe ser vulnerada por la presencia de tripulaciones extranjeras”.
Además, señaló la falta de convenios bilaterales con países como Malta y Lituania, lo que genera incertidumbre sobre la calidad de la capacitación y las licencias de las tripulaciones que llegarían a México.
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“Queremos certeza sobre la procedencia de sus exámenes médicos y adiestramientos”, puntualizó.
Implicaciones en el mercado laboral
Ante la percepción de que los pilotos extranjeros podrían ser una opción más económica, Domínguez Catzin aseguró que desconoce la lógica detrás de esta decisión y reconoció que en naciones con menor desarrollo aeronáutico —como algunos países de Centroamérica o Haití— los costos laborales pueden ser menores, aunque eso no justifica, dijo, una medida que podría vulnerar derechos laborales y estándares operativos.
El presidente del Colegio de Pilotos también advirtió sobre los riesgos del outsourcing en la aviación, una práctica que la SICT ha prohibido en diversos sectores.
“El arrendamiento de aeronaves con tripulación es, en esencia, una forma de outsourcing”, señaló. Esta figura, agregó, podría abrir la puerta a vacíos legales o a un debilitamiento del marco regulatorio.
Por último, Domínguez Catzin confirmó que el 8 de diciembre se instalará la primera mesa técnica para revisar a fondo estas preocupaciones. El objetivo será avanzar hacia un marco regulatorio que “garantice seguridad y certeza para los pilotos mexicanos”.