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En entrevista con Pamela Cerdeira, para MVS Noticias, Simón Hernández, abogado del caso García Rodríguez habló sobre Daniel García y el colectivo “Pena sin culpa”, quienes se reunieron con el ministro presidente de la SCJN.
En un contexto de creciente incertidumbre sobre la justicia en México, la Suprema Corte de Justicia tuvo una reunión que podría marcar un antes y un después en el manejo de la prisión preventiva oficiosa.
Hernández, compartió detalles sobre esta reunión, que tenía como objetivo buscar soluciones a dos casos que han pendido en la Corte durante años "La Suprema Corte tiene en sus manos la obligación de decidir cómo se cumple una sentencia internacional que ya lleva casi tres años sin respuesta".
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Este reclamo subraya la frustración de muchos contribuyentes, que ven en la inacción del sistema judicial un grave obstáculo. El abogado también criticó el uso de la prisión preventiva, señalando que, "lo que ha hecho en los últimos años es encarcelar a más personas pobres, a mujeres, a jóvenes, y a personas indígenas, de manera totalmente injustificada".
Solicitudes a la Suprema Corte
Durante la reunión, se hicieron tres peticiones concretas:
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1. Reactivación de los casos de Daniel García, incluyendo un amparo directo.
2. Solicitud de audiencias públicas sobre la prisión preventiva oficiosa.
3. Espacio para escuchar a las víctimas de esta medida. La respuesta de la Corte fue, al menos en términos políticos, receptiva.
Hernández agregó, "Hay una sensibilidad del tema; es vital que la Corte escuche también a las personas en prisión y a sus familias". Esta apertura sugiere un cambio, al menos en el discurso, respecto a cómo se debe abordar la justicia en el país.
Un sistema judicial en crisis
El abogado también mencionó los problemas intrínsecos del sistema: "La prisión preventiva se ha convertido en un mecanismo de extorsión para que las personas sean corrompidas y ofrezcan dinero al Ministerio Público, y eso no ha ayudado a disminuir la violencia o la inseguridad".
Esta afirmación resuena fuertemente en una sociedad que, más que nunca, clama por justicia. Los ciudadanos, a menudo ignorados en discusiones sobre justicia, ahora tienen la oportunidad de ser escuchados.
Sabemos que "no estamos en contra de la prisión, pero debe estar justificada". En un momento crítico para el futuro de la justicia en México, esta reunión es un indicativo de que el camino para la reforma aún está en construcción.