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En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Laura Ballesteros, Diputada de Movimiento Ciudadano, Arturo Ávila, Diputado de Morena y Federico Döring, Diputado del PAN, hablaron sobre la Marcha Generación Z.
La polémica por la marcha Generación Z llegó a la mesa de MVS Noticias, donde los diputados Laura Ballesteros (MC), Arturo Ávila (Morena) y Federico Döring (PAN) cruzaron acusaciones sobre violencia, manipulación política y el papel del gobierno en la respuesta a los jóvenes.
Polémica por la marcha Generación Z: diputados chocan por represión y manipulación política
Federico Döring fue el más crítico con la actuación de las autoridades capitalinas y el gobierno federal. Señaló que la marcha refleja “una trágica sociedad mexicana” y acusó a la administración de enfocarse en “agresiones a policías y no las causas de las marchas”. Para Döring, hubo un operativo deliberado: “Sheinbaum se quitó la máscara y mandó a golpear a mexicanos, vi un operativo diseñado”.
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Añadió que el gobierno debería escuchar a la ciudadanía y no desestimarla: “Yo no vivo en una secta como para que alguien me diga cómo pensar, México no es una secta”.
Desde Movimiento Ciudadano, Laura Ballesteros condenó la represión y llamó a deslindar responsabilidades. “Mi rechazo al uso de la fuerza desmedida y represión de la policía capitalina”, afirmó, destacando también que los jóvenes marcharon con temor por posibles agresiones.
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Jóvenes, violencia y narrativas enfrentadas
Según Ballesteros, el gobierno busca politizar la protesta: “Claro que se le da al gobierno la oportunidad de decir ‘eran agitadores políticos’”, dijo, exigiendo a Morena “dejar de meterse con los jóvenes del país”.
En contraste, el diputado morenista Arturo Ávila defendió que lo ocurrido expuso una manipulación opositora. “Lo que vimos en la pasada marcha es el reflejo claro de dónde está hoy la oposición”, afirmó, acusando el uso de bots y activistas ligados a Xóchitl Gálvez.
Sostuvo que la auténtica Generación Z no protagonizó la movilización: “La generación Z no estaba ahí”, subrayó, y aseguró que un grupo buscó provocar a los policías: “Después de 50 mentadas de madre, esos policías también son personas”.
Ávila incluso cuestionó la legitimidad digital del movimiento: “La cuenta principal de Generación Z era una cuenta que impulsaba la derecha en Venezuela, no es una cuenta mexicana”.
El debate sobre la marcha Generación Z reveló visiones profundamente enfrentadas: mientras unos denuncian represión y falta de escucha, otros señalan manipulación y violencia contra policías. Lo cierto es que la discusión sobre la marcha Generación Z continúa marcando el pulso político y social del país.