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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, la periodista Paulina Chavira analizó la reciente decisión del gobierno de Chihuahua de prohibir el uso del lenguaje inclusivo en escuelas, una medida que ha generado un intenso debate nacional sobre libertad de expresión, educación y la adaptación del idioma a nuevas realidades sociales.
¿Qué es el lenguaje inclusivo?
El lenguaje inclusivo, también conocido como lenguaje incluyente, busca formas de expresión que eviten marcar el género como norma. “Yo puedo decir ‘niñes’ o ‘niñex’, evitando el masculino como forma estándar”, explicó Chavira. Este tipo de expresión pretende representar a personas que no se identifican con los géneros tradicionales.
Por ello, los detractores sostienen que el español tiene estructuras gramaticales definidas, mientras que Chavira advierte que “determinados sectores de la sociedad temen que el lenguaje inclusivo cambie sus convicciones sobre el género”. Aun frente a esta resistencia, la lengua sigue evolucionando constantemente, adaptándose a los cambios sociales y culturales.
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¿Qué implica prohibir el lenguaje inclusivo en Chihuahua?
La decisión de limitar el uso del lenguaje inclusivo en escuelas ha generado preocupación entre educadores y especialistas en derechos lingüísticos. “Lo curioso es que se intenta imponer un modelo de comunicación que limita el entendimiento y la expresión”, comentó la experta.
Paulina Chavira advierte que la prohibición refleja un temor más amplio hacia los cambios sociales y nuevas formas de identidad. “Cuando prohibimos, eliminamos la posibilidad de cuestionarnos y abrirnos a nuevas realidades”.
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Además, consideró que el argumento de mantener una gramática “correcta” carece de perspectiva: “La lengua es un reflejo de nuestra cultura y nuestros tiempos; es hora de adoptar cambios que resuenen con la realidad actual”.
Educación y diversidad: un debate necesario
Chavira destacó que la conversación sobre lenguaje inclusivo trasciende más allá la gramática: “No es solo sobre palabras, sino sobre el reconocimiento de diversas identidades”.
En ese sentido, la medida adoptada por Chihuahua plantea un debate sobre cómo la lengua influye en las relaciones de poder, la educación y la inclusión social. Muchos expertos coinciden en que abordar el tema en el ámbito educativo es crucial para formar sociedades más tolerantes y conscientes de la diversidad.
"Abrirse al uso de un lenguaje inclusivo no solo enriquece la comunicación, sino que refleja un compromiso con la equidad y la inclusión en nuestra sociedad”, concluyó Paulina Chavira.
