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En su colaboración para MVS Noticias con Luis Cárdenas, Laura Coronado, académica de la Universidad Anáhuac y autora del libro “La libertad de expresión en el ciberespacio”, exploró la dinámica de la generación Z en el contexto de las redes sociales, a través de dos casos emblemáticos: el joven que afirma no haber pedido nacer y la influencer española conocida como Roro.
Coronado explicó que el primer caso gira en torno a un joven argentino de 21 años que, en tono de broma o tal vez en serio, sostiene que no está obligado a trabajar porque nunca consintió nacer.
Según sus palabras, "mis papás me obligaron a nacer, no me preguntaron si yo quería nacer, no me pidieron consentimiento [...] ¿Mis papás hayan querido darme la vida hace 21 años, ahora yo tenga que trabajar?".
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Esta postura ha generado debate sobre la responsabilidad y el sentido de obligación entre los jóvenes de esta generación.
El caso de Roro y la generación Z
Por otro lado, Laura Coronado también abordó el caso de Roro, una influencer española que publica videos cocinando para su novio, Pablo.
Esta práctica ha sido interpretada por algunos como un retroceso en la lucha feminista y un refuerzo de estereotipos tradicionales.
"Lo que tenemos que ver es que la persona es multidimensional [...] y las redes solo nos dan un aspecto de lo que somos", afirmó Coronado.
La discusión en torno a Roro refleja una polarización en la percepción de roles de género, donde su contenido es visto como sumisión por unos y como una expresión de cariño y elección personal por otros.
Coronado resaltó que esta tendencia de simplificación y estereotipado es peligrosa.
“Estamos hablando de una sociedad que está atendiendo mucho a simplificar y estereotipar”, dijo, y subrayó la importancia de ver más allá de una sola dimensión de la persona, tanto en redes sociales como en la vida real.
Finalmente, la académica enfatizó que la generación Z, aunque consciente de sus derechos, necesita también ser consciente de sus responsabilidades y obligaciones.
"Es una generación que cree que se lo merece todo [...] No se trata de estigmatizarlos, sino de hacerlos más conscientes de sus responsabilidades", dijo.
Los casos de Roro y el niño que no pidió nacer no solo ilustran las complejidades de la generación Z y su interacción con las redes sociales, sino también las tensiones intergeneracionales y las discusiones sobre roles de género en el contexto digital.