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En entrevista para MVS Noticias con Ana Francisca Vega, América Armenta, periodista de Sinaloa, habló sobre la Narco-contaminación: Además del incremento en las adicciones, las actividades del crimen organizado para producir droga también genera estragos en el medio ambiente.
"Es realmente impactante, porque todo inició con la idea de que Sinaloa, lo confirmamos, tiene alrededor del 90 por ciento de los laboratorios de droga sintética a nivel nacional", dijo.
Comentó que los estados que le siguen son Durango y Michoacán, pero con una medida mucho menor a la presentada por el estado del norte.
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Mencionó que cada vez las autoridades están destruyendo o dejando inhabilitando esos espacios; sin embargo, queda el daño ambiental.
"No se está atendiendo, mucho menos resarciendo el daño que queda en los cuerpos de agua, cercanos a estos espacios que se utilizan para elaborar droga sintética y todavía no tenemos algunos estudios ni desde la academia, ni de las organizaciones de la sociedad civil, y mucho menos de las autoridades federales, estatales o locales", expresó.
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No hay investigaciones sobre el daño ambiental que causan
La periodista afirmó que hay una preocupación genuina por parte de los habitantes de la zona, pues al comentarles el asunto, les brindaban más información del caso.
Hizo un llamado a las autoridades para que atiendan esos espacios, pues ni la Profepa, Semarnat o Cofepris tienen una investigación al respecto.
Señaló que las autoridades de seguridad son las encargadas de deshabilitar esos laboratorios para que ya no produzcan drogas, pero no les corresponde resarcir el daño ambiental, el cual está llegando a las comunidades y zonas urbanas de Sinaloa.
"Al inicio fue ir a estos laboratorios, principalmente a los que están en la zona serrana de Sinaloa, ir y observar en persona, de primera mano, cómo dejaban inhabilitados los laboratorios, pero entendemos que la Sedena, principalmente que es quienes son primeros respondientes y asisten, carecen de un protocolo para no generar un daño ambiental", añadió.
América Armenta abundó que los precursores químicos son dejados ahí, muchas veces son derramados, e incluso ha sido incinerados, pese a que generan un daño mayor al ambiente.