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La Cámara de Diputados de México aprobó una reforma constitucional que prohíbe la producción, distribución y venta de vapeadores. Esta medida, incluida en una reforma más amplia que busca combatir el tráfico de fentanilo, ha generado un intenso debate sobre sus implicaciones para la salud pública y la lucha contra las adicciones.
En entrevista para MVS Noticias con Luis Cárdenas, el diputado del PAN, Éctor Jaime, expresó su preocupación por equiparar la prohibición del fentanilo con la de los vapeadores.
Según Jaime, "el vapeador es una alternativa mucho menos dañina que el cigarro de combustión" y puede ayudar a los fumadores a dejar el hábito.
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Por su parte, el diputado de Morena, Arturo Ávila, defendió la reforma argumentando que el consumo de vapeadores está asociado a un aumento en el número de adolescentes que inician el consumo de tabaco y a la aparición de enfermedades respiratorias.
Ávila destacó la importancia de prevenir el consumo de sustancias nocivas y proteger la salud de los jóvenes.
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¿Mercado negro tras aprobación de Diputados contra vapeadores?
Uno de los puntos más controvertidos de la reforma es la posible creación de un mercado negro para los vapeadores.
Jaime advirtió que la prohibición total podría llevar a un aumento en el consumo de productos ilegales y adulterados.
Ávila, en cambio, confía en que las nuevas medidas de seguridad y las acciones coordinadas de las fuerzas del orden permitirán combatir el tráfico de estas sustancias.
La prohibición de los vapeadores en México representa un paso significativo en la lucha contra el tabaquismo y las adicciones. Sin embargo, sus implicaciones a largo plazo aún son inciertas.
La efectividad de esta medida dependerá en gran medida de la capacidad del gobierno para prevenir la aparición de un mercado negro y garantizar el acceso a alternativas terapéuticas para los fumadores que desean dejar el hábito.