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En entrevista con Citlali Sáenz en ausencia de Pamela Cerdeira para MVS Noticias, María Dolores Patrón Pat, lideresa de las Madres Buscadoras de Quintana Roo y madre de Francisca Mariner Flores habla de la desaparición, ya hace 4 años, de su hija y como es que su cuerpo, estuvo en manos del Semefo a un mes de su desaparición.
La búsqueda de un ser querido desaparecido es un camino doloroso, pero cuando la negligencia de las autoridades se suma al sufrimiento, la herida se profundiza. María Dolores Patrón, lideresa de las Madres Buscadoras de Quintana Roo, comparte la desgarradora historia de su hija, Francisca Mariner Flores, y la terrible experiencia que vivió con el Servicio Médico Forense (Semefo).
Francisca desapareció el 22 de junio de 2020. Un mes después, el 21 de julio, un cuerpo fue localizado e identificado con el número 441. Lo que María Dolores descubriría mucho después es que ese cuerpo, el de su hija, estuvo en manos del Semefo desde el principio.
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“Pasaron dos años para que me hicieran una prueba de ADN. Aun así, cuando la subieron a la plataforma, el resultado salió negativo. Lo mismo ocurrió con la muestra de mi otra hija. No entiendo cómo es posible que con mi nieta, hasta noviembre de 2024, resultó positivo”, expresó Patrón.
La madre denunció que durante este tiempo, las autoridades no realizaron su trabajo, lo que derivó en una acumulación de cuerpos no identificados en el Semefo.
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“Se han formado comunas de cadáveres. Hay personas que llevan años sin ser localizadas por sus familias”, lamentó.
La lucha contra la negligencia y la represión
Patrón relató cómo la falta de acción por parte de la Fiscalía y otras autoridades la obligó a convertirse en activista.
“Mi vida cambió completamente. Trabajaba para darle carrera a mi hija menor, pero con la desaparición de Francisca, perdí mi empleo y tuve que quedarme con mi nieta. Ahora dedico mi tiempo a ayudar a otras familias que enfrentan esta misma tragedia”, dijo.
La líder recordó los múltiples obstáculos que enfrentó, desde agresiones físicas hasta la represión policial. “Un fiscal llegó a golpearme, lo que me llevó al hospital. En otra ocasión, la gobernadora mandó policías a reprimirnos durante una protesta en la zona hotelera”, denunció.
Sin embargo, su perseverancia ha rendido frutos. Gracias a sus manifestaciones y presión social, se han implementado mejoras como la contratación de antropólogos y buzos especializados en la búsqueda de restos humanos. También se han agilizado los procesos para emitir fichas de búsqueda.
Justicia tardía, pero necesaria
Tras identificar el cuerpo de su hija, Patrón confirmó que la Fiscalía ha abierto una carpeta de investigación para determinar responsabilidades en la negligencia de su caso y otros similares. “Voy a tomar acciones legales. No quiero que otras familias vivan este calvario”, aseguró.
El activista subrayó que su lucha no termina aquí. “Seguiremos trabajando hasta que todos los desaparecidos sean localizados y las autoridades cumplan con su deber. No bajaremos la guardia”, concluyó.