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En entrevista con Citlali Sáenz en ausencia de Pamela Cerdeira para MVS Noticias, la chef Arely Lugo, cuenta cuáles son los platillos típicos del maratón Guadalupe-Reyes.
El maratón Guadalupe-Reyes, que inicia con la celebración de la Virgen de Guadalupe el 12 de diciembre y culmina el 6 de enero con la Rosca de Reyes, es una temporada cargada de tradición, religión y, sobre todo, deliciosa comida.
La chef Arely Lugo comparte los platillos más emblemáticos que forman parte de estas fiestas, su historia y cómo cada uno representa nuestra herencia cultural.
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Del mole novohispano a las luces de Navidad
Arely Lugo destacó que el maratón Guadalupe-Reyes combina influencias históricas y adaptaciones mexicanas de costumbres extranjeras. “El origen de muchas de nuestras tradiciones decembrinas viene de los romanos, quienes celebraban las fiestas saturnales en honor a Saturno. Decoraban con velas, que hoy se han transformado en las luces de Navidad, y organizaban banquetes con carne y vino”.
Con la colonización, estas costumbres llegaron a México y se enriquecieron con ingredientes locales, dando lugar a platillos únicos como los romeritos, el bacalao y el tradicional ponche navideño.
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Romeritos: un platillo barroco lleno de historia
“Los romeritos son un platillo barroco, entre más ingredientes, mejor”,este guiso, originario de la época novohispana, combina mole, tortitas de camarón, papas cambray y romeritos, una planta que también se consume en Cuaresma.
“Es un claro ejemplo de cómo las monjas en los conventos de la Nueva España crearon platillos exquisitos con los recursos disponibles”, comentó.
El ponche: de la India a México
El ponche, esencial en las posadas, tiene un origen global, pues esta bebida proviene de la India, donde se preparaba con aguardiente, azúcar, limón y especias. Los españoles lo trajeron a México, donde se enriqueció con frutas locales como guayaba, tejocote, caña y piloncillo.
Rosca de Reyes: el cierre perfecto del maratón
El maratón culmina con la Rosca de Reyes, una tradición que simboliza la protección del Niño Jesús de la amenaza del rey Herodes. Lugo señaló que esta tradición llegó a México desde España y Francia, y fue perfeccionada en los conventos novohispanos.
“El muñeco escondido en la rosca representa al Niño Jesús y quienes lo encuentran se convierten en los padrinos, comprometiéndose a ofrecer tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria”, explica.
El maratón Guadalupe-Reyes no solo es una celebración religiosa, sino también una muestra de cómo las tradiciones culinarias han evolucionado, mezclando influencias extranjeras con la creatividad mexicana. Desde los romeritos hasta la Rosca de Reyes, estos platillos reflejan nuestra identidad y el placer de compartir en familia.