Pocas veces un cementerio se convierte en el escenario perfecto para una lección de cine, pero si alguien podía lograrlo era Tim Burton. El reconocido director llevó su singular estilo al Panteón Civil de Dolores en la Ciudad de México, donde ofreció una clase magistral rodeada de lápidas históricas y leyendas del arte mexicano.
Lejos de un ambiente lúgubre, el sitio se transformó en un aula inusual pero mágica, ideal para reflexionar sobre creatividad, inspiración y oscuridad, temas que han marcado la filmografía de Burton. Frente a estudiantes y seguidores, el creador de "El joven manos de tijera" compartió anécdotas, ideas y su manera única de ver el mundo desde una estética sombría pero profundamente humana.
Tim Burton comparte anécdotas en México
El clima lluvioso no fue impedimento para que decenas de fans se reunieran en una de las capillas del Panteón Civil de Dolores, donde Tim Burton ofreció una clase magistral muy especial. El director de películas como "Beetlejuice" y "El extraño mundo de Jack" apareció entre los asistentes con su estilo característico, dispuesto a compartir su visión creativa en un lugar poco común.
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“Bienvenidos a mi nueva casa”, dijo con una sonrisa mientras caminaba por el recinto, rodeado de lápidas y un ambiente que parecía sacado de una de sus películas. Acompañado por una pieza musical interpretada por Johnny Depp, Burton habló sobre su conexión con los cementerios y cómo estos espacios lo han inspirado a lo largo de su carrera.
Durante la charla, el director confesó que desde joven encontró en los cementerios un espacio para imaginar y crear, lejos del ruido cotidiano. Para él, estos lugares no representan miedo, sino tranquilidad y reflexión, lo que los convierte en escenarios perfectos para desarrollar ideas cargadas de emoción y profundidad.
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Siempre encontré los cementerios como lugares pacíficos y creativos, son sitios donde podía ir a pensar ideas. Al mismo tiempo son emocionantes, tranquilizantes y espirituales. Además, han tenido mucha fuerza en mi vida creativa
También recordó cómo los monstruos del cine clásico marcaron su infancia y despertaron su interés por contar historias diferentes. Aseguró que se sentía más cercano a estas criaturas solitarias y sensibles que a los villanos humanos, porque detrás de cada monstruo, decía, hay una historia que merece ser contada con empatía.
Me identificaba con los monstruos porque suelen ser las criaturas más emotivas en las películas (...) Los aldeanos enojados en Frankenstein eran personas sin rostro, mientras que los monstruos son más emotivos e incomprendidos
Burton también compartió que el dibujo fue su refugio desde temprana edad, especialmente por ser un niño introvertido. Aunque no se consideraba talentoso, encontró en los trazos una forma honesta de comunicarse con el mundo. Más que una habilidad, era una herramienta para poner en orden sus ideas y darles forma cuando las palabras no le salían con facilidad.
Un vistazo especial antes de la gran exhibición
La clase magistral fue parte de las actividades previas a la inauguración de "El laberinto", una exposición que abrirá sus puertas el 26 de junio en la Ciudad de México. Con más de 200 piezas entre dibujos, esculturas y objetos de sus películas, la muestra ofrece una mirada íntima al proceso creativo de Tim Burton, desde los primeros trazos hasta la construcción de mundos que han marcado generaciones.
El evento se llevó a cabo en coordinación con la asociación civil encargada del lote donde se ubica la capilla, elegida por su ambiente y carga simbólica. Al cierre del encuentro, Burton expresó su afinidad con la forma en que la cultura mexicana aborda la muerte, un tema presente en gran parte de su obra, y confesó sentirse especialmente conectado con el país por esa razón.