J Balvin ha generado revuelo entre sus fanáticos mexicanos, esto debido a que durante su visita a la Ciudad de México (CDMX) decidió conocer la Basílica de Guadalupe y mostrar su devoción a la Virgen de Guadalupe. Lo que llamó la atención de los fanáticos fue poder ver al cantante comprar diversos objetos relacionados a la Virgen.
Las imágenes del cantante colombiano comprando diversos objetos religiosos y presumiendo algunas medallas de la Virgen se volvieron virales rápidamente en redes sociales. Sin embargo; el artista ha expresado su fe en varias ocasiones hechos que han generado gran apoyo entre la comunidad mexicana.
J Blavin presumió sus medallas de la Virgen
Fue por medio de redes sociales que J Balvin presumió unas medallas nuevas de la Virgen, estas piezas fueron adquiridas durante su visita a la Basílica de Guadalupe. La imagen fue compartida por el artista con un mensaje en donde señalaba que visitó a “Virgencita de Guadalupe”; además mostrar felicidad por su visita a México.
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No es la primera vez que J Balvin habla sobre su fe y espiritualidad, a menudo citando cómo esta lo ha ayudado a superar momentos difíciles, incluyendo sus luchas con la ansiedad y la depresión. Su declaración como "Guadalupano" no solo es un homenaje a la cultura religiosa mexicana, sino que también subraya el papel que juega la fe en su vida personal.
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Peregrinación de la Basílica de Guadalupe
La peregrinación a la Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México es uno de los eventos de fe más grandes y significativos del mundo. Cada año, millones de fieles católicos, conocidos como guadalupanos, se dirigen al santuario mariano para conmemorar las apariciones de la Virgen María al indígena San Juan Diego en el Cerro del Tepeyac.
El punto culminante de estas peregrinaciones ocurre en torno al 12 de diciembre, la fiesta de la Virgen. En los días previos y durante esta fecha, la Basílica recibe un flujo que puede superar los 12 o 13 millones de personas. Esta afluencia convierte al recinto en el segundo santuario católico más visitado del mundo, solo detrás de la Basílica de San Pedro en el Vaticano
