Brincos Dieras, actualmente es uno de los comediantes más buscados del país, pero no siempre disfrutó de la fama y los buenos sueldos de los que ahora goza, contó en una reveladora entrevista con el 'Escorpión Dorado', donde el comediante compartió sus humildes inicios y los desafíos que enfrentó para llegar al reconocimiento actual.
Antes de convertirse en payaso, Brincos Dieras trabajaba en limpieza y como mensajero en Monterrey, su ciudad natal, con ingresos de apenas 80 pesos a la quincena, una realidad que cambió cuando descubrió su verdadera vocación siendo monaguillo en una Iglesia.
¿Cómo fueron sus inicios?
En sus primeros shows como comediante, Brincos Dieras contó que no cobraba más de 100 pesos por presentación. En la entrevista, también dijo que adoptó la estrategia de "cobrar el show a 80 pesos, equivalente a su salario quincenal, y descansar los otros 14 días". Esta modesta tarifa no solo marcó sus inicios, sino que demostró ser el primer paso hacia una carrera exitosa.
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A pesar de sus humildes comienzos, Brincos Dieras encontró en la comedia su verdadero camino. Realizaba shows infantiles en piñatas de su zona, ganando en un día lo que solía percibir en dos semanas. La demanda de sus presentaciones creció rápidamente, llegando a realizar hasta cinco eventos diarios entre miércoles y domingo.
La conversación con el 'Escorpión Dorado' también reveló el estilo único de Brincos Dieras, quien confesó que su humor negro y pesado ha sido una constante a lo largo de su carrera. Aunque inicialmente se presentaba en eventos infantiles, descubrió que su verdadero público eran los adultos.
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Hoy, Brincos Dieras es un payaso y comediante destacado, realizando giras por México y Estados Unidos. Su historia inspiradora demuestra que, a pesar de los inicios difíciles, el esfuerzo y la pasión pueden transformar la adversidad en éxito.