El queso de puerco es un embutido tradicional en la dieta mexicana, frecuentemente presente en tortas, sándwiches y botanas. Sin embargo, su nombre puede llevar a confusión: no contiene lácteos, sino que es un producto cárnico elaborado a partir de partes específicas del cerdo.
Recientemente, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio para analizar su composición y veracidad en el etiquetado, revelando datos que todo consumidor debería conocer.
¿Qué es realmente el queso de puerco?
Contrario a lo que su nombre sugiere, el queso de puerco no es un derivado lácteo, sino un embutido cocido y prensado elaborado principalmente con partes carnosas, adiposas y cutáneas de la cabeza del cerdo, como cachetes, lengua, orejas y piel. Estos ingredientes se curan, pican en trozos pequeños y se mezclan con sal, especias y aditivos para darle su sabor y textura característicos.
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Ingredientes principales:
- Partes cárnicas de la cabeza y patas de cerdo.
- Sal común (sodio) para la curación.
- Especias como laurel, tomillo, mejorana y clavo.
- Aditivos como nitritos (para color y conservación) y fosfatos (para retener agua).
- Gelatina natural proveniente de cartílagos y piel, que actúa como aglutinante.
¿Por qué se le llama “queso”?
El nombre “queso de puerco” proviene de su método de elaboración y presentación. Durante su producción, la mezcla de carne y especias se prensa en moldes similares a los utilizados para quesos lácteos. Además, la gelatina que se libera durante la cocción se solidifica al enfriarse, dando una apariencia similar a la de un queso firme y rebanable.
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¿Cuáles son los mejores quesos de puerco? Esto dice Profeco
En mayo de 2025, la Profeco publicó un estudio en la Revista del Consumidor donde analizó 10 marcas de queso de puerco. Los resultados mostraron que algunas marcas no eran veraces en su declaración nutricional:
- Parma Campestre: Declaró un 25% de proteína y 17% de grasa, pero contenía 16.6% de proteína y 24.8% de grasa.
- PAR: Declaró un 20% de grasa, pero contenía un 27.4%.
Todos los productos cumplieron con los estándares de calidad sanitaria y normativas de nitritos (máximo 156 mg/kg), pero se detectaron excesos de sodio y grasas saturadas en varias marcas.
Marcas recomendadas por Profeco:
- Alpino, Capistrano, D-KAR, FUD, Galicia, Peñaranda, Salamanca y Tangamanga.
El queso de puerco aporta proteínas y colágeno, beneficia la piel y articulaciones, pero su consumo excesivo conlleva riesgos como el alto contenido en sodio, consumo de nitritos, se asocian con riesgos cancerígenos y las grasas saturadas contribuyen al colesterol alto y obesidad. Consúmelo, pero con moderación y como lo recomienda Profeco.