¿Te imaginas un futuro sin preocupaciones económicas al momento de tu retiro? Hoy te traemos un consejo invaluable que te ayudará a construirlo sin siquiera darte cuenta: la domiciliación de Afore de tus aportaciones voluntarias. No, no tienes que darle una casa a tu Afore; ¡al contrario, tu Afore podría ayudarte a tener la casa de tus sueños si ahorras desde hoy!
¿Qué es la domiciliación de Afore?
La domiciliación Afore es una forma inteligente y sencilla de hacer crecer tu fondo de ahorro para el retiro. Es similar a cuando domicilias el pago de un servicio, con una diferencia crucial: ¡aquí no estás pagando nada, estás invirtiendo en ti mismo! Al domiciliar tu Afore, programas aportaciones voluntarias que se cargarán automáticamente desde tu cuenta bancaria a tu cuenta individual de Afore. Esto significa que puedes ahorrar sin tener que recordar hacer depósitos cada mes.
Lo mejor de esta opción es su flexibilidad. No hay cantidades forzosas ni plazos estrictos. Tú decides cuánto quieres aportar (desde 100 hasta 5 mil pesos) y con qué frecuencia (mensual, semanal o quincenal), según tus posibilidades. Es un método sin complicaciones para asegurar un futuro financiero más sólido.
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¿Cómo domiciliar tu Afore? ¡Es más fácil de lo que crees!
El proceso para domiciliar tu Afore es ágil y seguro, y puedes hacerlo a través de la página de e-sar o la práctica app Afore Móvil.
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Si eliges hacerlo vía web (e-sar):
Ten a la mano: Tu CURP, tarjeta de débito, CLABE interbancaria y el nombre de tu banco.
Inicia el proceso: Accede al enlace proporcionado por e-sar y completa la pre-solicitud con tus datos personales y bancarios.
Recibe tu folio: Una vez llena la pre-solicitud, obtendrás un folio de seguimiento.
Formaliza el trámite: Tu Afore se pondrá en contacto contigo para concretar el proceso, que incluirá la firma de un contrato.
Define tus plazos: Indica el plazo de tus inversiones (corto, mediano o largo plazo). Si buscas beneficios fiscales, elige la opción "Complementarias para el retiro", ¡recuerda que son deducibles de impuestos!
¡Listo! Los cargos comenzarán a realizarse de forma automática.
Si prefieres la máxima sencillez, te recomendamos descargar la app Afore Móvil. Desde ahí, configurar tu ahorro voluntario domiciliado te tomará solo unos minutos. ¡Es tan fácil que te sorprenderá!
¿Por qué domiciliar tus aportaciones voluntarias en tu Afore?
Las razones son contundentes y benefician directamente tu futuro:
Un mejor nivel de vida en tu retiro: Asegúrate de disfrutar la etapa dorada de tu vida con la tranquilidad económica que mereces.
Beneficios fiscales: Las aportaciones complementarias para el retiro son deducibles de impuestos, lo que puede ayudarte a obtener un saldo a favor en tu declaración anual.
Disponibilidad de recursos: Si realizas ahorro voluntario a corto plazo, puedes disponer de esos recursos cuando los necesites.
Rendimientos superiores: Tu Afore ofrece rendimientos más atractivos que otros instrumentos de inversión disponibles para montos similares.
¡No hay mejores razones para empezar a actuar hoy mismo! La domiciliación de Afore es el secreto mejor guardado para un retiro digno y confortable. Y recuerda, como todo buen secreto que funciona, ¡tienes que compartirlo!