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¿Más rica que Apple? A esto asciende la fortuna de la Iglesia Católica

De acuerdo con la Administración del Patrimonio de la Santa Sede (APSA), se reveló un informe de gestión de activos del año 2023.

Pero uno de los pilares más fuertes es su cartera inmobiliaria.
Pero uno de los pilares más fuertes es su cartera inmobiliaria.Créditos: Canva.
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La fortuna de la Iglesia Católica ha sido revelada en el más reciente informe de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), correspondiente al ejercicio 2023. Con cifras que han sorprendido a más de uno, el balance económico refleja no solo una sólida estructura financiera, sino también un enfoque estratégico en la inversión y gestión de activos.

¿Cuál es el patrimonio neto de la iglesia Católica?

Según el informe, APSA logró un beneficio neto de 45.9 millones de euros, de los cuales destinó 37.9 millones para apoyar las actividades de la Curia Romana, superando los 32.27 millones del año anterior. Esta gestión permitió aumentar el patrimonio neto en 7.9 millones de euros, todo sin necesidad de vender propiedades institucionales.

En cuanto a inversiones, la fortuna de la Iglesia Católica incluye activos en valores internacionales, renta fija y otros instrumentos financieros con bajo riesgo y alto impacto social, alineados con los principios de la Doctrina Social de la Iglesia. Solo en 2023, el patrimonio mobiliario generó un superávit económico de 27.6 millones de euros.

La riqueza mobiliaria de la iglesia Católica

Pero uno de los pilares más fuertes es su cartera inmobiliaria: APSA administra más de 5 mil inmuebles en Italia y el extranjero, incluyendo ciudades como Londres, París y Ginebra. En Roma se concentra el 92 por ciento de las propiedades, muchas de ellas en zonas clave cercanas al Vaticano. Esta gestión generó un superávit de 35 millones de euros.

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Destaca la apuesta de APSA por conseguir cada vez mejores resultados adaptando las herramientas tecnológicas en uso, pero también colaborando con profesionales del sector para reducir el tiempo entre la puesta en venta de los inmuebles y su posterior alquiler.

Con estas cifras, no es exagerado preguntarse si la fortuna de la Iglesia Católica rivaliza con la de gigantes como Apple, pero sin duda alguna, grandes números se mueven alrededor de esta religión.