La discusión sobre la reducción de la jornada laboral en México marca un punto de inflexión histórico. El país, que actualmente tiene una de las jornadas más extensas según la OCDE con 48 horas semanales, se prepara para transitar hacia un modelo de 40 horas, uniéndose a una tendencia global que prioriza el bienestar sin sacrificar la productividad.
El debate cobra especial relevancia ante propuestas alternativas, como la del empresario Carlos Slim, quien sugiere concentrar las 48 horas actuales en solo cuatro días, una visión que contrasta con la reforma oficial que busca reducir el tiempo total de trabajo.
Jornada laboral de 4 días: Un cambio con consenso
Durante 2025, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) condujo un proceso de diálogo nacional sin precedentes, celebrando seis foros públicos para escuchar a empresarios, sindicatos, académicos y organismos internacionales.
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La Subsecretaria de Empleo de la STPS, Quia Chávez Domínguez, destacó que el cambio se realizará de manera "gradual, responsable, ordenada y justa", reconociendo las particularidades de sectores como el turismo, la manufactura y la agricultura.
El gobierno federal confirmó que la iniciativa de reforma será enviada al Congreso antes del 15 de diciembre de 2025. De aprobarse, su implementación no sería inmediata ni uniforme.
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México en el mapa de las jornadas laborales
La reforma busca situar a México en un estándar internacional del que hoy está alejado. Según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), una gran parte del mundo, incluyendo a la mayoría de los países de la OCDE, ya opera con jornadas de 40 horas o menos.
Países líderes en bienestar laboral:
- Francia: Jornada semanal de 35 horas.
- Dinamarca: Promedia 33 horas a la semana, combinado con 25 días de vacaciones, y es constantemente rankeado entre los países más felices del mundo.
- Alemania y Países Bajos: Ejemplos de que menos horas pueden correlacionarse con alta productividad.
En el extremo opuesto, México se encuentra entre los países con jornadas más extensas. Un análisis de la OCDE posiciona a los trabajadores mexicanos entre los que más horas efectivas trabajan al año (2,193 horas), solo por detrás de Perú y muy por encima del promedio recomendado de 1,736 horas. En América Latina, países como Colombia, Guatemala y El Salvador también reportan jornadas largas, superando las 45 horas semanales.
Sin embargo, el camino no está exento de retos. Los empresarios, especialmente de MiPymes que generan más del 70% del empleo, piden cautela y apoyo. Los desafíos incluyen reorganizar turnos, mantener la cobertura operativa en sectores de servicio continuo, y absorber costos sin afectar la competitividad. En respuesta, se han planteado medidas de acompañamiento como estímulos fiscales, asesoría técnica y programas de capacitación.
La reducción de la jornada laboral a 40 horas en México no es una concesión, sino un derecho largamente esperado que alinea al país con los estándares internacionales de trabajo digno. Este cambio, resultado de un amplio diálogo social, busca equilibrar de una vez por todas la productividad con el bienestar humano, demostrando que trabajar menos horas puede significar, en realidad, vivir y producir mejor. ¿Qué opinas?