El Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT) anunció la revocación de 13 rutas aéreas operadas por aerolíneas mexicanas hacia territorio estadounidense, al acusar a México de violar los términos del acuerdo bilateral de transporte aéreo vigente desde 2016.
La decisión, dada a conocer por el secretario de Transporte, Sean Duffy, marca un nuevo episodio de tensión entre ambos países en materia de aviación civil y competencia. De acuerdo con el anuncio oficial, la medida entrará en vigor dentro de tres meses.
Durante una conferencia, Duffy señaló que México “ilegalmente canceló y congeló vuelos de transportistas estadounidenses durante tres años sin consecuencias”, por lo que el gobierno estadounidense decidió aplicar restricciones a aerolíneas mexicanas mientras se revisa el cumplimiento del tratado aéreo.
Te podría interesar
¿Cuáles son las aerolíneas afectadas por la tensión entre México y EU?
El Departamento de Transporte de Estados Unidos argumentó que las autoridades mexicanas han obstaculizado la competencia, al retirar o reasignar franjas horarias —conocidas como slots— a aerolíneas estadounidenses en los aeropuertos de la Ciudad de México y Felipe Ángeles, beneficiando presuntamente a compañías locales.
Las rutas aéreas revocadas corresponden a operaciones de Aeroméxico, Volaris y VivaAerobus, que ahora enfrentarán restricciones para operar o ampliar determinados servicios hacia ciudades estadounidenses hasta que se resuelvan las presuntas violaciones al acuerdo bilateral.
Te podría interesar
Además, el DOT anunció la congelación temporal de nuevas aprobaciones de rutas o frecuencias adicionales para aerolíneas mexicanas, como medida de presión diplomática, destaca la agencia internacional EFE.
Impacto en las aerolíneas y próximas negociaciones
De acuerdo con el gobierno de Estados Unidos, México “ha denegado o limitado injustamente” los derechos de operación de sus aerolíneas bajo el tratado vigente, lo que representa una infracción directa a los compromisos de reciprocidad.
Por ahora, los vuelos actualmente en operación no se verán afectados, aunque los planes de expansión podrían quedar suspendidos mientras avanzan las negociaciones bilaterales entre ambos países.
El conflicto abre un nuevo capítulo en las relaciones aéreas entre México y Estados Unidos, que desde 2016 habían mantenido un esquema de cooperación estable y en crecimiento. Las autoridades de ambos países deberán encontrar una solución en los próximos meses para evitar mayores afectaciones al tráfico aéreo y a los pasajeros que viajan entre ambas naciones.