El Acuerdo Nacional para una República Rural Justa y Soberana–Acuerdo de Chinameca, firmado entre organizaciones campesinas, indígenas y afromexicanas y la ahora presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, es la herramienta que hay que cuidar y defender, afirmó el subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Suárez Carrera.
Pactado en Chinameca, Morelos, el acuerdo “es el único que firmó Sheinbaum Pardo con un sector de la sociedad mexicana y nos llena de felicidad porque eso indica que la política de transformación hacia el campo va a continuar”, destacó en el marco de la conferencia 59 del Ciclo autosuficiencia alimentaria.
Suárez Carrera destacó que este pacto representa la continuidad de la Cuarta Transformación, iniciada por el presidente López Obrador en el 2018, y el reconocimiento de un sujeto social diverso y complejo por parte de la presidenta electa.
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Con el Acuerdo, explicó, la agenda está marcada sustancialmente en tres ejes: la aprobación de las reformas constitucionales que propuso el presidente el pasado 5 de febrero; la elevación a rango constitucional de los programas de Bienestar y los de apoyo a pequeños productores, así como la prohibición del maíz transgénico para consumo humano.
Marca además una política de defensa de la transición hacia la agroecología y deja atrás el modelo neoliberal en agricultura y el control corporativo de las políticas públicas, aplicadas por los gobiernos neoliberales.
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No obstante, avanza con el compromiso de priorizar la soberanía alimentaria y el no al maíz transgénico, al glifosato y a los plaguicidas.
Otro eje es la Ley General de la Alimentación Adecuada y Sostenible, en la que se plantea, por mandato, una nueva política que garantice el derecho constitucional a la alimentación con producción de alimentos saludables, garantía de acceso a toda la población, compras gubernamentales y reservas estratégicas, entre otras, indicó.