Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 fueron testigos de impresionantes récords mundiales en atletismo, como el de la venezolana Yulimar Rojas en triple salto, el noruego Karsten Warholm y la estadounidense Sydney McLaughlin en 400 metros vallas. Estas hazañas, junto con una serie de marcas personales destacadas, han generado una acalorada discusión sobre el impacto de las ‘super zapatillas’ y la tecnología en el rendimiento de los atletas.
Las ‘super zapatillas’, también conocidas como 'zapatillas voladoras', representan una nueva generación de calzado deportivo con suelas gruesas que actúan como trampolines, propulsando a los atletas hacia adelante y reduciendo el impacto del golpe. Estos tenis para correr han sido señaladas como una de las claves detrás de los nuevos récords mundiales.
Correr con tecnología
La polémica no solo se centra en las zapatillas sino también en la pista de atletismo de Tokio, la cual está diseñada con gránulos tridimensionales de hule integrados a la capa superior de Mondotracks Ws.
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La tecnología de la pista maximiza la velocidad y el rendimiento de los deportistas, proporcionando un impulso hacia adelante y devolviendo la energía gracias a su diseño de 14 milímetros de grosor con pequeñas bolsas de aire.
Durante Tokio 2020 Karsten Warholm se convirtió en el primer atleta en correr los 400 metros vallas en menos de 46 segundos (45.94), mientras que Sydney McLaughlin dejó su propio récord en 51.46 segundos al día siguiente. Estos logros han sido en parte atribuidos a las ventajas tecnológicas de las pistas y zapatillas.
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Aunque es difícil cuantificar el impacto exacto de estas innovaciones tecnológicas en los tiempos y las marcas de los saltos horizontales, lo cierto es que la pista de Tokio y las ‘super zapatillas’ han provocado un debate intenso.
Es así como hay opiniones divididas sobre las ‘super zapatillas’ que rompieron récords mundiales en atletismo durante Tokio 2020, pues unos ven estas tecnologías como una ayuda legítima para alcanzar nuevos récords y otros las consideran una forma de dopaje tecnológico.
Con información de Pamela Salcedo.