El 20 de agosto en el Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (HRAEPY) se detectó el primer caso de miasis de gusano barrenador en una persona en el estado. Actualmente, el paciente se encuentra estable y completamente curado.
En el caso del tratamiento, al igual que en el caso del ganado, se retiran las larvas de la herida. Las personas adultas mayores o quienes no pueden cuidar de sí mismas son más propensas a ser afectadas por la miasis del gusano barrenador. Además, de quienes trabajan en zonas rurales de cerca con el ganado.
Sin embargo, con una atención oportuna, la miasis del gusano barrenador no es un diagnóstico de muerte, ni para el propio ganado o animales de compañía como los perritos que lo presentan.
“No hay necesidad en ningún momento de sacrificar a ningún animal, realmente el tratamiento tanto en animales como humanos es el mismo, es curar la herida, retirar la herida y hacer la curación. Y si llega a necesitar antibiótico eso es por decisión médica, pero una vez que se cura la herida ya no hay mayor problema, no deja ninguna secuela de otro parásito”, explicó en entrevista, la química farmacobiologa, encargada de la vigilancia epidemiológica del gusano barrenador en Yucatán, Alegría Ledezma Helguera.
Las recomendaciones para evitar la miasis de gusano barrenador en personas es cubrirse completamente la piel con camisas de manga larga y pantalones. Así como usar repelentes y curarse las heridas. Y con los animales de compañía, asegurarse que tener tenencia responsable, evitar que estén fuera de casa.
