NATURALEZA

A 23 años del Huracán Isidoro: la memoria de un ciclón que marcó a Yucatán y Campeche

El Huracán Isidoro fue la novena de doce tormentas y el segundo huracán de la temporada de huracanes en el Atlántico de 2002. Su origen se remonta al 14 de septiembre de aquel año, cuando la Depresión Tropical N.º 10 del Atlántico se formó a partir de una onda tropical.

Escrito en YUCATÁN el

El Huracán Isidoro fue la novena de doce tormentas y el segundo huracán de la temporada de huracanes en el Atlántico de 2002. Su origen se remonta al 14 de septiembre de aquel año, cuando la Depresión Tropical N.º 10 del Atlántico se formó a partir de una onda tropical.

El fenómeno evolucionó rápidamente y, el 22 de septiembre a las 17:00 horas (hora local), el radar meteorológico de Cancún detectó que la muralla que rodeaba al ojo del ciclón golpeaba con fuerza la costa norte de Yucatán. Poco después, el ojo de Isidoro impactó directamente en Telchac Puerto, con vientos máximos sostenidos de 205 km/h y rachas de hasta 250 km/h, iniciando así uno de los episodios más devastadores en la historia reciente de la península.

Durante el resto de ese día y por 35 horas consecutivas, el centro del huracán se desplazó lentamente hacia el suroeste, “barriendo” los estados de Yucatán y Campeche con lluvias torrenciales, marejadas e intensas ráfagas de viento. Los daños fueron catastróficos en infraestructura, viviendas, agricultura y servicios básicos, lo que marcó a miles de familias que tuvieron que reconstruir su vida tras el desastre.

Cabe recordar que, ante su trayectoria, una zona de alerta ciclónica se había establecido desde la mañana del 20 de septiembre, abarcando desde Tulum, Quintana Roo, hasta Progreso, Yucatán.

Hoy, a 23 años de aquel impacto, Isidoro sigue siendo un referente en la memoria colectiva de quienes vivieron su paso. ¿Qué recuerdos trae a tu memoria este huracán que transformó para siempre la vida en la península?