Desde el 2013 personas activistas que luchan contra la crueldad animal denunciaron las malas condiciones de vida que tienen los animales del zoologico la Reina de Tizimín en Yucatán. Revelaron que cada administración comete delitos relacionados con la venta ilegal de animales y negligencia en cuidados de los animales, lo que tiene como resultado la muerte de las distintas especies, como fue el caso de un jaguar, que aseguraron falleció en octubre por una herida en la pata que no tuvo los cuidados adecuados.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ya está enterada. Ya han acudido en años anteriores a las instalaciones del zoológico. Las activistas no entienden por qué no clausuran el lugar.
“Queremos que intervenga Profepa pero nacional porque los de aquí no nos hacen caso”, expuso una de las activistas que lucha por el bienestar animal, Doris Canul.
El jaguar que murió por una herida descuidada revivió la polémica del maltrato que viven los animales en el zoológico la Reina de Tizimín, llegó al parque en el mes de abril como un intercambio con una Unidad de Manejo Ambiental (UMA).
“En área de cuarentena estaba una monita que tenían de decomiso que tenía el brazo fracturado, estaba en una jaula oxidada, estaba inflamada y se rascaba mucho el brazo. Había una boa con problemas dermatológicos con hongos, se le hacía curaciones y terminó en carne viva su piel. Una aguililla que llevó la policía tenía una fractura que nunca le curaron. También un hipopótamo que tenía dieta a base de alimento de cerdo ¿como es posible que coma alimento de cerdo?", declaró la exmedica veterinaria del zoológico, Elizabeth Sánchez.
Como parte de la denuncia reiteraron que la inversión se va a lo visible como las instalaciones, lo calificaron como un “maquillaje”. Sin embargo, en la atención de los animales como alimento y medicación veterinaria no gastan dinero.
Las activistas acusaron al director del zoológico Manuel Alcocer Perera, “Chicho”, de no tener las credenciales para estar al frente del lugar. Al igual que al médico veterinario Raul Sansor Nah, quien está especializado en ganado (es líder ganadero) y no en fauna silvestre.
A las denuncias de crueldad animal se ha sumado la Red de Bienestar Animal de Quintana Roo, quien en el 2018 denunció en la Profepa la situación de los animales en el zoológico.