El transporte público en Yucatán sigue siendo tema de debate y críticas. Aunque en los últimos años se han incorporado unidades modernas al sistema Va y Ven, la pregunta que muchos usuarios se hacen es: ¿la Agencia de Transporte realmente cuenta con personal capacitado en materia de movilidad?
Autobuses antiguos vs. actuales: más similitudes de las que crees
A simple vista, los nuevos autobuses parecen un salto al futuro en comparación con los antiguos. Sin embargo, en aspectos técnicos como dimensiones y capacidad de pasajeros, no hay grandes diferencias.
La medida estándar de los autobuses, tanto de antes como de ahora, oscila entre 10 y 11 metros de largo y 2.5 metros de ancho, por lo que en tamaño y capacidad pueden ser prácticamente iguales. Incluso modelos antiguos como el Marcopolo Torino, los autobuses de Umán, Línea Urbe, algunos de Caucel, así como los de las rutas 69 Xoclán y 67 Mulsay Minis 2000, contaban con dimensiones similares a las actuales unidades del Va y Ven.
La verdadera diferencia está en el diseño y la accesibilidad.
Accesibilidad universal: un cambio necesario
Los nuevos autobuses de entrada han transformado la experiencia de transporte para muchos usuarios. Aunque cuentan con menos asientos, cumplen con el principio de accesibilidad universal, lo que permite a personas con discapacidad, adultos mayores, mujeres embarazadas o usuarios con movilidad reducida abordar y viajar con mayor facilidad.
En contraste, los autobuses convencionales dificultaban o directamente impedían el acceso a una tercera parte de estos grupos vulnerables. En este sentido, el avance no solo es técnico, sino social e inclusivo.
Tecnología y medio ambiente
Otro punto importante es la tecnología aplicada a las nuevas unidades. Los actuales autobuses del Va y Ven son más amigables con el medio ambiente, ya que cumplen con normativas internacionales Euro 5 y Euro 6, que reducen considerablemente las emisiones contaminantes.
Los antiguos autobuses, en cambio, ni siquiera alcanzaban estándares como EPA 03, lo que representaba un daño ambiental mucho mayor.
Operadores: entre la capacitación y la indiferencia
En cuanto al personal operativo, la diferencia también es notoria. Los choferes del Va y Ven aunque algunos usuarios se quejan del mal trato de ciertos conductores han pasado por capacitaciones de manejo y atención al usuario, algo que no ocurre en la mayoría de las unidades convencionales, cuyos operadores consideran innecesario actualizarse.
Este contraste influye directamente en la calidad del servicio que recibe el pasajero.
¿El problema está en la dirección?
A pesar de las mejoras visibles, muchas personas coinciden en que el transporte público en Yucatán no mejorará de fondo mientras no haya un cambio estructural en la Agencia de Transporte. La falta de estrategias claras, decisiones técnicas cuestionables y un avance que muchos consideran lento han puesto en la mira a su actual director, Jacinto Sosa.
Cada vez son más las voces que piden su renuncia, señalando que la modernización no solo depende de autobuses nuevos, sino de una visión integral y personal capacitado en movilidad que entienda las necesidades reales de la población.
Los nuevos autobuses del Va y Ven representan un paso importante hacia un transporte más inclusivo, sustentable y ordenado. Sin embargo, los avances técnicos y tecnológicos no bastan si al frente de la Agencia no hay un equipo capacitado y comprometido con transformar la movilidad en Yucatán desde su raíz. La pregunta sigue en el aire: ¿cuándo llegará ese cambio?
