Delia Patricia Buendía, 'Ma Baker', comenzó a vender droga al mismo tiempo que tenía trabajos legales. Fue cajera, vendedora y trabajadora de limpieza para la Secretaría de Educación Pública y a esos salarios mínimos les agregaba las ganancias que generaba como narcomenudista, su organización criminal llegó vender hasta 300 mil dosis de cocaína por mes y a controlar más de 500 narcotienditas.
La “Ma Baker” llegó a ganar hasta 5 millones de pesos a la semana. Tanto dinero en efectivo se volvió un problema, porque ya no era posible esconderlo en casas. Había que introducirlo al sistema legal para blanquearlo, así que el Cártel de Neza invirtió en más de 100 empresas para lavar su dinero sucio. Compró autolavados, tiendas de telefonía, restaurantes de comida china y su mejor negocio: la Arena Neza y sus funciones de lucha libre.