El conjunto húngaro era una maquinaria comandada por Sándor Kocsis y Ferenc Puskás quienes aplastaron sin piedad a todos sus rivales: 9-0 a Corea del Sur y 8-3 a Alemania en la primera fase; 4-2 a Brasil en Cuartos de final y por el mismo marcador a Uruguay en semifinales para enfrentarse a los germanos nuevamente en el partido definitivo donde los teutones cobraron venganza de la goleada en la primera ronda.
Cuatro años más tarde se celebró la Copa del Mundo de Suecia 1958 donde un espectacular Brasil ganaba su primera justa mundialista tras realizar un estupendo juego de futbol.
Con autoridad y un juego exquisito por parte de Djalma Santos, Didi, Moacir, Zagallo, Garrincha, Vavá y un joven promesa de nombre Edson Arantes Do Nacimiento “Pelé”, los amazónicos goleaban en Estocolmo, Suecia, al anfitrión por marcador de 5-2.