La modelo Jennifer Barlow, residente de Atlanta, Georgia, decidió pasar unas vacaciones en las Bahamas; no obstante, tras su retorno a casa, comenzó a experimentar molestias en su rodilla.
Minutos antes de sumergirse en el mar para nadar, Jennifer sufrió un pequeño corte mientras se depilaba, el cual no consideró relevante en ese momento.
Barlow relató que el momento en que se percató que padecía algo grave, fue cuando se desplomó en la cocina de su casa y su hermano se apresuró a llevarla a urgencias. En ese momento, los médicos le dijeron que tras haber ingresado al mar con una herida expuesta, fue invadida por la fascitis necrotizante, una bacteria come carne.
De acuerdo con The New York Post, Barlow sufrió un choque séptico y presentó signos de insuficiencia renal y hepática, lo que requirió el uso de una máquina para asistir su respiración, así como una serie de medicamentos para mantener su estabilidad.
Jennifer estuvo en estado de coma durante 10 días y sometida a 12 intervenciones quirúrgicas para eliminar los tejidos dañados. A pesar del tratamiento médico, tres meses después tuvo que enfrentar la amputación de su pierna derecha.
"Esta es la razón por la que me he mantenido en silencio durante los últimos cinco meses. No había querido compartir la extraña infección contra la que estoy luchando, ya que mi enfoque era simplemente sobrevivir. Necesitaba espacio para enfrentar esta batalla y sanar", expresó la modelo a través de su cuenta de Instagram.
A raíz de estos sucesos, la familia de la joven inició una campaña de recaudación de fondos para apoyar su proceso de recuperación.
Los allegados de Jennifer indican que el dinero recolectado será destinado a "asistirla con los gastos médicos, los costos de una prótesis, el proceso de rehabilitación y todas las adaptaciones necesarias para afrontar su nueva discapacidad".
¿Qué es la fascitis necrotizante?
La fascitis necrotizante, también conocida como "bacteria come carne" o "infección carnívora", es una infección grave y potencialmente mortal de los tejidos blandos del cuerpo. Se caracteriza por la rápida propagación de bacterias, generalmente de los géneros Streptococcus, Staphylococcus, o Clostridium, que provocan una degradación y necrosis (muerte del tejido) de la piel, los músculos y otros tejidos subyacentes.
Esta infección puede ser extremadamente agresiva y avanzar de manera rápida. Las personas que la contraen pueden presentar síntomas como hinchazón, enrojecimiento, dolor intenso y fiebre. Además, la piel puede parecer estirada y brillante debido a la inflamación. La fascitis necrotizante puede avanzar rápidamente y provocar daño severo en los tejidos, lo que puede llevar a complicaciones graves como insuficiencia orgánica y shock séptico.
El tratamiento de la fascitis necrotizante generalmente implica la administración inmediata de antibióticos intravenosos de amplio espectro para combatir la infección. Además, puede requerir intervenciones quirúrgicas para eliminar los tejidos afectados y prevenir una mayor propagación de la infección. En algunos casos graves, la amputación de partes del cuerpo puede ser necesaria para salvar la vida del paciente.
Debido a la agresividad de esta infección y su potencial para volverse letal rápidamente, es fundamental buscar atención médica de urgencia si se sospecha de una fascitis necrotizante.