Un álbum de bodas es un contenedor de los mejores momentos del día más importante de la vida de los enamorados que deciden unir sus vidas; sin embargo, ¿qué representa para quienes se separan?
Para quitar un peso de encima a las separaciones, una empresa decidió dar respuesta a quién se queda el álbum y qué hacer con éste, siempre brindando una sensación de paz.
Así es como una empresa en China ofrece sus servicios para ser quienes destruyan de la manera más conveniente los álbumes de quienes se divorcian y ven esas fotos como una mentira o un símbolo del supuesto amor eterno que se prometieron y no se dio.
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¿Quién es el especialista en destruir álbumes de bodas de divorciados?
A través de la red social china Weibo, se dio a conocer el entendimiento de un hombre, que encontró su vocación en dar un nuevo uso y satisfacción a los divorciados.
El hombre de apellido Liu de Langfang, provincia Shandong en el este del gigante asiático, comenzó la empresa ofreciendo proteger la privacidad personal de los divorciados.
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Bailu Video informó que el primer paso fue el establecer un servicio de destrucción fuera de línea en la ciudad.
Liu explicó que la mayoría de las fotografías para las bodas se elaboran con material acrílico que no se quema fácilmente, y en muchos lugares incluso se prohíbe quemar fotos de personas vivas.
Añadió que tirar a la basura los álbumes es difícil y podrían incluso exponer su privacidad personal; por lo que al ofrecer como motivación proteger ese punto, ha tenido gran demanda su servicio.
El proceso es simple y económico, los clientes envían sus fotografías por correo a su local, y se les cobra dependiendo el peso de las fotos, por lo cual, los costos oscilan entre los 10 y más de 100 yuanes, entre 24 y 240 pesos mexicanos.
Una vez tiene el álbum y la cotización, oscurece las fotos con pintura en aerosol y graba en video el procedimiento; finalmente envía a los clientes una copia para su verificación.
Las fotos se trituran profesionalmente y los escombros se eliminan en una central eléctrica.
Liu explicó que su central es la única en China que se encarga de destruir los álbumes de boda, y aunque se haya en una provincia, han tenido pedidos de todas las provincias y municipios del país.