Un día como hoy, pero de 1972, se localizaron a 16 jóvenes de un avión uruguayo siniestrado 72 días antes en la coordillera de los Andes en Chile, mejor conocidos como los supervivientes de los Andes.
El avión uruguayo transportaba a 72 personas, todos ellos componentes de un equipo de rugby de Montevideo, sin embargo solo se salvaron 16, quienes fueron encontradas en condiciones terribles, pero que estaban vivos gracias al haber comido los restos de sus compañeros fallecidos tras el impacto.
¿Qué ocurrió en la Tragedia de los Andes?
Luego de ser entrevistados tras el rescate, los supervivientes de los Andes indicaron que el copiloto Dante Lagurara, al mando en ese momento, creyó erróneamente que la aeronave había llegado a Curicó para posteriormente descender al Aeropuerto Los Cerrillos, sin embargo, no se dio cuenta que todavía estaba a entre 60 y 70 km y por descender tanto el avión uruguayo chocó contra una montaña.
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El avión uruguayo perdió las alas y la sección de cola, mientras que el resto se deslizó por la montaña a una velocidad estimada de 350 km/h y descendió unos 725 metros antes de estrellarse contra el hielo.
Tras la desaparición de la aeronave las autoridades inmediatamente iniciaron la búsqueda, sobrevolaron el lugar del accidente varias veces durante los días siguientes, sin embargo no encontraron nada por la magnitud del clima, mientras los jóvenes se desesperaban porque ellos sí veían pasar el avión.
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El 21 de octubre de 1972 los esfuerzos de búsqueda se cancelaron tras no hallar nada y llegar a la conclusión de que la aeronave se había hecho pedazos tras el impacto, pero no era así, muchos sobreviveron tras el accidente pero se fueron muriendo con el paso de los días por las condiciones climatológicas, los golpes tras el golpe y la falta de alimento.
¿Cómo se salvaron los supervivientes de los Andes?
El avión transportaba a 45 personas, incluidos 19 miembros de un equipo de ruggby, quienes iban a Chile a disputar un encuentro.
Según la versión de los Supervivientes de los Andes, varios murieron tras el impacto, otros cuatro murieron la primera noche debido a las gélidas temperaturas y sus heridas. En las semanas posteriores, murieron doce más, ocho de ellos tras una avalancha, haciendo más triste la historia.
Los 16 sobrevivientes sufrieron congelación, sed y hambre, los primeros días sobrevivieron con lo poco que había de alimento en el avión, los demás días tuvieron que recurrir a descongelar la nieve para tomar agua y comer carne humana de las personas que fallecieron tras el impacto o de los que se iban muriendo con el paso de los días.
Fue haste el 12 de diciembre que Nando Parrado y Roberto Canessa, dos de los supervivientes de los Andes dicidieron dejar a sus compañeros para encontrar ayuda, escalaron un pico montañoso de 4 mil 650 metros de altura, sin equipo y caminaron hacia Chile, donde se encontraron a un campesino de nombre Sergio Catalán quien les ayudó a encontrar a sus demás compañeros.
Finalmente, 72 días después del accidente, se rescató al último de los 16 supervivientes de los Andes que habían esperado en la zona de la Tragedia. Esto motivo a escribir libros y realizar películas del hecho.