Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, es el momento perfecto para disfrutar de los días soleados en la playa, pero no podemos olvidar lo más importante: proteger nuestra piel. Elegir y usar el protector solar adecuado es esencial no solo para evitar quemaduras solares, sino también para prevenir daños a largo plazo, como el envejecimiento prematuro de la piel.
Para sacar el máximo provecho a tu protector solar y garantizar su efectividad, es necesario aplicarlo correctamente y en las cantidades adecuadas. A continuación, te damos algunos consejos prácticos sobre cómo seleccionar el producto ideal para tu tipo de piel y cómo aplicarlo de forma efectiva durante tu día en la playa.
La manera correcta de elegir un protector solar
Al seleccionar un protector solar, es importante considerar la sensibilidad de tu piel y seleccionar el Factor de Protección Solar (FPS) adecuado. Este valor determina cuánto tiempo puedes estar al sol sin quemarte, dependiendo de tu tipo de piel. Por ejemplo, las personas con piel más clara, clasificadas como Fototipo I, solo pueden resistir unos 10 minutos al sol antes de necesitar protección.
Te podría interesar
El FPS (Factor de Protección Solar) te dice cuánto más tiempo puedes estar al sol sin quemarte. Retomando el ejemplo anetrior, si tu piel aguanta 10 minutos al sol sin quemarse, un protector solar con FPS 30 te permite estar 30 veces ese tiempo, o sea, 300 minutos, que son 5 horas. Esto depende de tu tipo de piel, ya que las pieles más claras se queman más rápido que las pieles más oscuras.
- Fototipo I y II
Pieles claras: Es recomendable utilizar un protector solar con un FPS de 50 como mínimo. - Fototipo III y IV
Pieles de tonos medios: Se recomienda un FPS de al menos 30. - Fototipo V y VI
Pieles oscuras: Un FPS de 20 es suficiente para una protección adecuada.
¿Cómo usar protector solar correctamente en la playa?
Un mito común sobre el protector solar es que debes aplicarlo 20 o 30 minutos antes de exponerte al sol para que sea efectivo. Sin embargo, esto no es cierto. Como ahora sabes, cada tipo de piel tiene un tiempo determinado en el que puede estar al sol sin protección, y los protectores solares ofrecen una barrera inmediata. Así que no necesitas esperar tanto, solo aplica el protector y disfruta del sol sin preocupaciones.
Te podría interesar
Es importante tener en cuenta que aplicar protector solar una sola vez al día no garantiza la protección adecuada, ya que su efectividad disminuye con el tiempo. Factores como la exposición al sol y la transpiración pueden hacer que el producto pierda su acción protectora. Por esta razón, es recomendable volver a aplicarlo cada dos horas para asegurar una mejor protección.
Cuando se utiliza protector solar, es importante aplicarlo en todas las áreas expuestas al sol, incluidas aquellas que suelen ser pasadas por alto, como los párpados, las orejas, los labios y el cuello. No olvides que el cuello, aunque a menudo se ignora, también necesita protección. Y si vas a nadar o sudar en exceso, recuerda reaplicar el protector solar para mantener tu piel protegida.