La proteína en polvo se ha convertido en uno de los suplementos más consumidos dentro del mercado, gracias a la llegada del fitness, muchas personas han comenzado a realizar ejercicio de manera más habitual, y, por ende, se ha dado el aumento del consumo de suplementos alimenticios; sin embargo, algunos podrían generar problemas de salud.
Una reciente investigación ha revelado que algunas proteínas en polvo pueden contener altos contenidos de plomo. Este metal pesado puede tener graves efectos perjudiciales como provocar daños en los sistemas neurológico, cardiovascular y otras funciones corporales, esto ha encendido las alertas y se han dado más detalles sobre dichos suplementos contaminados.
Estudio revela que algunas proteínas en polvo contienen plomo
La organización independiente y sin fines de lucro, Consumer Reports, ha dado a conocer que se realizó un estudio a 23 batidos y polvo proteicos, este análisis reveló que la mayoría de estos suplementos alimenticios mostró una alta presencia de plomo. Esto ha generado alerta, debido a que este suplemento se ha vuelto uno de los más consumidos en el mundo.
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Según la investigación, las proteínas en polvo de origen vegetal han presentado los niveles más elevados, superando entre 12 y 15 veces el nivel de plomo que se podría considerar seguro. En algunos casos extremos, se presentaron entre 6 y 8 microgramos de plomo por ración bebible.
Algo que ha sorprendido es que se encuentra marcas que presentan certificaciones de seguridad de la Fundación Nacional de Ciencias (NSF), sin embargo, Consumer Reports ha señalado que la NFS permite 10 microgramos de plomo al día; esto supera el límite de 0.5 microgramos que sugiere la Oficina de Evaluación de Riesgos para la Salud Ambiental de California.
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¿Qué daños puede provocar el consumo de plomo?
La exposición a altas cantidades de plomo es particularmente dañina para el cerebro y el sistema nervioso, siendo los niños los más vulnerables debido a que sus sistemas están en desarrollo. A niveles muy altos, el plomo puede causar daños permanentes que se manifiestan en convulsiones, pérdida del control muscular y coma.
Además del sistema nervioso central, el plomo tiene un impacto negativo en otros sistemas vitales del cuerpo como son el sistema sanguíneo, los riñones y el sistema digestivo. En los casos más extremos y con niveles muy elevados, la intoxicación por plomo es una emergencia médica que puede provocar pérdida de la conciencia y, finalmente, la muerte.