La tecnología forma parte cada vez más de nuestras vidas, y las infancia no son la excepción de ello, por lo que es normal que, a medida que crecen, los niños quieran tener un celular propio.
Sin embargo, es importante que los padres tomen una decisión informada sobre la edad adecuada para hacerlo, debido al impacto que les puede generar.
¿A qué edad deberían usar el celular los niños?
En la era digital actual, los niños están expuestos a la tecnología a una edad cada vez más temprana. Sin embargo, la pregunta sobre cuándo es apropiado darle un celular a un niño es una cuestión compleja que no tiene una respuesta única.
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La mayoría de los expertos recomiendan que los niños esperen hasta los 12 años para tener su primer celular. A esta edad, los niños suelen tener la madurez suficiente para usar el celular de manera responsable.
Además, ya han desarrollado las habilidades cognitivas necesarias para comprender los riesgos potenciales de la tecnología, como el acoso cibernético o el uso excesivo de pantallas.
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Sin embargo, hay algunos factores que pueden influir en la decisión de los padres. Por ejemplo, si el niño vive en una zona rural o necesita el celular para comunicarse con sus padres o con otros adultos, puede ser apropiado darle un celular antes de los 12 años.
La pedagoga Leticia Garcés, autora de ‘Infancia bien tratada, adolescencia bien encaminada’, sostiene que es importante retrasar al máximo posible la adquisición del primer celular por parte de los niños.
¿Cuáles son los riesgos de darle un celular a un niño?
La exposición temprana a la tecnología puede tener una serie de riesgos para el desarrollo infantil, entre los que se incluyen:
- Problemas de salud mental: El uso excesivo de la tecnología puede provocar problemas de ansiedad, depresión y adicción.
- Problemas de aprendizaje: La tecnología puede distraer a los niños de sus estudios y dificultar el aprendizaje.
- Problemas de socialización: El uso excesivo de la tecnología puede aislar a los niños de sus compañeros y dificultar las relaciones interpersonales.
La decisión de darle un celular a un niño es una decisión importante que debe tomarse con cuidado. Los padres deben considerar la edad del niño, sus necesidades y los riesgos potenciales de la tecnología.