¿Alguna vez te has preguntado cómo extender tu señal WiFi sin gastar dinero en dispositivos costosos? La solución podría estar más cerca de lo que piensas, escondida en las configuraciones de tu propio router. Dicho esto, a continuación te explicamos cómo un simple ajuste puede mejorar tu experiencia de conexión y llevar el Internet a cada rincón de tu casa.
¿Qué es el modo bridge y por qué es importante activarlo en tu WiFi?
El modo bridge, también conocido como modo puente, es una función poco conocida pero increíblemente útil para conectar dos redes independientes mediante dispositivos inalámbricos. Esta opción, recomendada por expertos para mejorar la cobertura en toda la casa, transforma tu router principal en un simple módem, delegando las funciones de enrutamiento a un segundo dispositivo.
¿Cómo funciona exactamente el modo bridge?
Al activar el modo bridge, se modifican las funciones principales del router. Normalmente, este procesa la señal de Internet y la distribuye entre los dispositivos conectados. Con dicho truco, el router original se convierte en un módem puro, mientras que un segundo router asume la tarea de gestionar y repartir la conexión.
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¿Cuáles son los pasos para activar el modo bridge y mejorar tu WiFi?
Ahora, para activarlo necesitas seguir una serie de pasos:
- Recopila información crucial: SSID, modo de seguridad WiFi, contraseña y frecuencia.
- Accede a la configuración de tu router a través de tu navegador web.
- Ingresa tus credenciales de administrador.
- Busca la opción "Puente inalámbrico" en la configuración avanzada.
- Activa el modo puente y configura los ajustes del segundo router.
- Guarda los cambios y espera a que el dispositivo se reinicie.
¿Qué beneficios ofrece esta configuración en WiFi?
Al implementar el modo bridge, extiendes significativamente el alcance de tu WiFi sin invertir en equipos adicionales. Esta solución es ideal no solo para hogares grandes, sino también para oficinas y espacios que requieren una conexión de Internet de amplio alcance. Además, optimiza el rendimiento de tu red al distribuir eficientemente las tareas entre dos dispositivos.