WhatsApp, la conocida aplicación de mensajería, se ha convertido en un objetivo atractivo para los ciberdelincuentes. Estos individuos tienen como objetivo tomar el control de las cuentas de los usuarios para acceder a información personal y bancaria con fines fraudulentos.
Aunque se implementan medidas de seguridad como la autenticación de dos factores, es fundamental estar alerta a las señales que podrían indicar que tu cuenta ha sido comprometida. A continuación, te presento algunas pistas clave:
Señales de alerta:
- Actividad inusual: Si observas mensajes leídos o llamadas realizadas que no reconoces, podría ser señal de intrusión en tu cuenta.
- Sesiones desconocidas en WhatsApp Web: Revisa la sección "Dispositivos conectados" en WhatsApp. Si encuentras sesiones abiertas en ubicaciones que no conoces, es motivo de alerta.
- Cambios en tu perfil: Si notas modificaciones no autorizadas en tu foto de perfil, estado o nombre, es probable que tu cuenta haya sido comprometida.
- Solicitudes de verificación inesperadas: Si recibes una solicitud para verificar tu número de teléfono sin motivo aparente, evita proporcionar el código, ya que podría ser un intento de usurpar tu cuenta.
¿Qué hacer ante la sospecha de que mi WhatsApp fue hackeado?
- Desinstala y reinstala la aplicación: Al hacer esto, se cerrará automáticamente la sesión en todos los dispositivos vinculados.
- Verifica tu número de teléfono: Al reinstalar WhatsApp, se te solicitará que verifiques tu número de teléfono. Ingresa el código que recibas por SMS para recuperar el acceso a tu cuenta.
- Activa la verificación en dos pasos: Esta función añade una capa adicional de seguridad, requiriendo un código adicional al iniciar sesión desde un nuevo dispositivo.
Para proteger tu cuenta de WhatsApp, evita compartir información personal o bancaria. Mantente alerta ante mensajes o llamadas sospechosas que soliciten datos confidenciales. Además, asegúrate de mantener la aplicación actualizada para recibir parches de seguridad y utiliza contraseñas seguras y únicas para reducir el riesgo de ser víctima de ciberdelincuentes.