El año 2027 marcará el lanzamiento de una nueva misión de la NASA, la cual viajará hasta Titán, la luna gigante de Saturno, al ser considerada como uno de los lugares más prometedores para buscar vida.
Se espera que la misión llegue a su destino a mediados de la década de 2030, para comenzar un viaje de descubrimientos que podrían generar una nueva comprensión del desarrollo de la vida en el universo.
La misión es denominada como 'Dragonfly', la cual llevará el instrumento espectrómetro de masas DraMS o Dragonfly, que está diseñado para ayudar a que los científicos puedan concentrarse en la química que tiene lugar en Titán.
Te podría interesar
De igual forma, se podría tener luz sobre los tipos de pasos químicos que ocurrieron en el planeta Tierra, que llevaron a la formación de la vida.
De acuerdo con lo explicado por la NASA, la abundante y compleja química de Titán, así como riqueza en carbono, su océano interior y la presencia de agua líquida en su superficie, vuelven a esta luna como un destino ideal para estudiar procesos químicos prebióticos y la potencial habitabilidad de un entorno extraterrestre.
Te podría interesar
Es por esto que la misión apoyada por el DraMS permitirá que los científicos en la Tierra puedan estudiar de manera remota la composición química de la superficie de Titán.
“Queremos saber si el tipo de química que pudo ser importante para los primeros sistemas prebioquímicos en la Tierra estaría ocurriendo en Titán”, explica la doctora Melissa Trainer, del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland.
Trainer es una de las principales investigadoras adjuntas de la misión 'Dragonfly', al ser una científica planetaria y astrobióloga que se especializa en Titán. También dirige las operaciones con el instrumento que se empleará en la misión.
La agencia detalla que la misión contará con un helicóptero robótico, que aprovechará la baja gravedad y la densa atmósfera de la luna, para volar entre los diferentes puntos de interés en la superficie, los cuales e hayan a varios kilómetros de distancia uno del otro.
Esto dará la facilidad de desplazamiento a la misión y sus instrumentos, cada vez que se terminen los análisis entre un sitio nuevo y otro.
Además, llevarán un taladro para la adquisición de material orgánico complejo, que perforará fuera de la superficie muestras de un tamaño de alrededor de un gramo.
Además, llevarán un taladro para la adquisición de material orgánico complejo, que perforará fuera de la superficie muestras de un tamaño de alrededor de un gramo, que serán llevadas dentro del cuerpo principal del módulo de aterrizaje, a una zona que se denominará el 'ático', donde estará el DraMS.
Una vez en el sitio, a las muestras se les irradiará un láser o serán vaporizadas en un horno para ser medidos por el instrumento.
“DraMS está diseñado para observar las moléculas orgánicas que podrían estar presentes en Titán, su composición y su distribución en diferentes entornos de la superficie”, dice Trainer.
Dragonfly es la cuarta misión del programa Nuevas Fronteras de la NASA, y desde hace años se iniciaron los preparativos para las investigaciones que se realizarán en la luna Titán de Saturno.