La moneda está en el aire, y las presiones que tiene Google sobre sus actividades monopólicas son más evidentes cada vez; las autoridades Estados Unidos quieren que venda su navegador de Chrome, como primera medida para resarcir el daño, pero ¿qué ocurrirá si se concreta?
El pasado miércoles 20 de noviembre, el Departamento de Justicia estadounidense pidió a los tribunales cambios estructurales en el negocio de Google, entre ellos, que se desprenda de Chrome o del sistema operativo para móviles Android, para contrarrestar su posición dominante en el sector.
Su petición judicial también contempla que se fuerce a la compañía para que deje de pagar los miles de millones de dólares al año a socios como Apple, para que el motor de búsqueda de Google sea el predeterminado en los navegadores web de sus dispositivos.
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Además de la venta, el futuro del algoritmo que predomina actualmente se vería drásticamente afectado, ya que el Departamento de Justicia pidió también que Google no vuelva a entrar en el mercado de navegadores durante 5 años.
Lo anterior no es una mala idea, si se toma en cuenta que Google tiene el control de lo que es relevante o no en internet, y con sus interminables cambios de algoritmo, los usuarios podrían tomar un respiro del bombardeo invasivo de sugerencias de contenido, pero ¿qué dice la IA al respecto?
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Le preguntamos a Gemini qué pensaba de la situación y su respuesta fue la siguiente:
“La venta de Chrome podría abrir la puerta a una mayor competencia en el mercado de navegadores. Nuevos propietarios podrían invertir más en desarrollo, innovación y marketing, lo que beneficiaría a los usuarios con más opciones y mejores características”.
Sin embargo, también vaticina la ralentización del desarrollo web por la fragmentación en el mercado.
“Si bien Google tiene control sobre este algoritmo, es importante destacar que su objetivo principal es ofrecer los resultados más relevantes a los usuarios”; afirmó.
Para la IA, las críticas apuntan a que el algoritmo puede estar sesgado de alguna manera, ya sea por diseño o por los datos que se utilizan para entrenarlo.