Nunca se habían encontrado restos de plástico a una altitud tan elevada.
Científicos de la Universidad de Plymouth (Reino Unido) han identificado microfibras de este material contaminante en la nieve recolectada a 8 mil 440 metros sobre el nivel del mar, a unos cuatrocientos metros de la cima del monte Everest.
Las muestras recogidas en el Everest y en el valle situado al pie de esta montaña fueron analizadas en la Universidad de Plymouth y contienen cantidades sustanciales de fibras de poliéster, acrílico, nailon y polipropileno.
Los investigadores creen que las fibras plásticas halladas en el llamado \u2018Balcón del Everest\u2019 pueden provenir de elementos utilizados en las expediciones para alcanzar la cumbre, o podrían haber sido transportadas desde altitudes más bajas por los vientos.
“Encontrar microplásticos cerca de la cima del Everest nos recuerda que debemos hacer más para proteger nuestro medio ambiente“, señala la investigadora Imogen Napper, autora principal del estudio, que tuvo el apoyo de National Geographic.
Esos trocitos de plástico de un tamaño menor a 5 milímetros, denominados microplásticos, están conquistando silenciosamente el planeta, extendiendo su presencia y sus efectos contaminantes y dañinos para todas las formas de vida y la salud humana.