Científicos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) informan que con la cáscara de naranja, se puede remover hasta el 95% del cromo (Cr) en aguas residuales contaminadas con metales pesados, desechadas en el proceso industrial para el curtido de piel.
La investigación, que se realiza en la Unidad Profesional Interdisciplinaria en Ingeniería Campus Guanajuato (UPIIG), consiste en evaluar la capacidad de bioadsorción que tiene la cáscara de naranja, para eliminar metales pesados.
Para ello, se han hecho pretratamientos que han dado como resultado diferentes porcentajes de remoción de este contaminante.
El coordinador del proyecto, José Alfredo Hernández Maldonado, señaló que en el caso del cromo trivalente Cr (III) se logró, a través de distintos pretratamientos (que van desde la aplicación de acetonas y metanol hasta hexano) la remoción de hasta el 95% del metal pesado y, en el caso del Cromo hexavalente Cr (VI), el mayor porcentaje de remoción alcanzado fue del 79%.
Actualmente, el equipo de investigación trabaja en el desarrollo de un sistema de biofiltro con cáscara de naranja, que se colocaría al final del proceso de curtido de piel, ya que ese es el punto en el que hay mayor concentración de partículas de cromo.
El prototipo utiliza contenedores de acrílico conectados a tubos de PVC por donde circula el flujo de las aguas residuales. "Para los ensayos se utilizaron soluciones de cromo trivalente Cr (III), elaboradas en el laboratorio, así como aguas de residuo proporcionadas por una curtiduría, ubicada en el municipio de León, Guanajuato", finalizó.