Investigaciones recientes han revelado que Venus, el planeta más caliente del sistema solar, no siempre fue así.
Hace millones de años, Venus contaba con una fresca atmósfera y grandes océanos, lo que revela que el planeta pudo ser igual de habitable que la Tierra.
Actualmente, el planeta no es habitable, ya que cuenta con una atmósfera compuesta en mas del 96 por ciento por dióxido de carbono, lo cuál la vuelve sofocante para cualquier humano.
Las temperaturas del planeta oscilan entre los 462 grados Celsius y se complementa con densas nubes compuestas de ácido sulfúrico.
En parte, el cambio tan extremo del planeta se debe a que gira extremadamente lento, un día en Venus dura hasta 243 días en la Tierra, por lo tanto cualquier punto de la superficie está expuesto a la luz solar constante durante meses.
Según los resultados de varias investigaciones de la NASA, lo que provocó que Venus se convirtiera en el planeta más caliente del Sistema Solar, fue el océano mismo.
Con información de Debate.